Sé que ya quieren entrar de nuevo a la palabra de Dios, así que tome su Biblia y vayamos al octavo capítulo de Mateo. Mateo, capítulo 8. Esta es una de esas historias maravillosas que en cierta manera son conocidas, pero al mismo tiempo están llenas de realidades no descubiertas que no podemos agotar en una sesión; pero haremos nuestro mejor esfuerzo por cubrir las cosas que aquí encontramos que probablemente son las más importantes para nosotros.
Mateo, capítulo 8. Esta mañana, quiero leer el versículo 28 hasta el final del capítulo. “Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino. Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo? Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos. Y los demonios le rogaron diciendo: Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos. Él les dijo: ‘Id.’ Y ellos salieron, y se fueron a aquel hato de cerdos; y he aquí, todo el hato de cerdos se precipitó en el mar por un despeñadero, y perecieron en las aguas. Y los que los apacentaban huyeron, y viniendo a la ciudad, contaron todas las cosas, y lo que había pasado con los endemoniados. Y toda la ciudad salió al encuentro de Jesús; y cuando le vieron, le rogaron que se fuera de sus contornos.”
Creo que ya para este punto, si ha estado con nosotros a lo largo de nuestro estudio de Mateo, es obvio para usted que el Espíritu Santo está presentando las credenciales de Jesucristo como el Mesías. Dios había determinado redimir la tierra, redimir a los hombres, redimir al universo de la maldición del pecado. Para hacer eso, Él vendría al mundo en forma del Mesías y retomaría al hombre para sí mismo en la redención del hombre, Él retomaría la tierra y el universo para sí mismo también.
Cuando Jesucristo vino, Él de hecho era Dios haciendo exactamente eso. La primera vez que vino, para redimir al hombre; la segunda vez que vendrá, redimirá a la tierra y al universo a Su alrededor. Entonces, la preocupación de Mateo conforme él escribe este Evangelio maravilloso consiste en que entendamos que Jesucristo es el Rey, el Mesías, el Gobernante legítimo del mundo, el Rey de la tierra, el Monarca de todos los monarcas, el Hijo de Dios, Dios en carne humana, Dios encarnado, el segundo Miembro de la Trinidad. En otras palabras, es la deidad lo que debemos ver en el señor Jesucristo.
Ahora, uno de los factores primordiales en probar sin duda alguna que Cristo es de hecho el Mesías es mostrar que Él tiene poder sobre las fuerzas invisibles del mundo sobrenatural, las huestes demoníacas. Si el Señor Jesucristo de hecho va a redimir la tierra, si Él va a invertir la maldición, si Él va a tomar posesión de la humanidad caída, debe tener la capacidad de vencer aquello que lo controla en este momento. Y eso, claro, es Satanás y sus demonios. Entonces, alguien que va a retomar este mundo debe tener la capacidad de romper el poder del mundo sobrenatural. Por lo tanto, de manera repetida a lo largo del registro del Evangelio, encontramos ocasiones en las que el escritor nos da ejemplo de la capacidad de Jesús de echar fuera demonios. Él lo puede hacer instantáneamente, lo hace con autoridad, lo hace con una palabra, lo hace con facilidad y nos da una clara prueba de que Él puede enfrentar al reino de las tinieblas.
Ahora, nos parece interesante que ya hemos visto que Jesucristo puede resistir a Satanás. Donde en Mateo, capítulo 4, Satanás vino a tentar al Señor; y ya hemos estudiado eso. Satanás lo tentó en esencia en tres tentaciones específicas. Y en cada caso, el Señor fue victorioso. Ahora ya sabemos entonces que Cristo tiene el poder de resistir a Satanás. Él tiene el poder de estorbar los propósitos de Satanás. Podríamos decir que ya sabemos que Él confrontó a Satanás y nunca se rindió a él. Pero Su poder va aún más allá de eso. No es sólo cuestión de que Él pueda estorbar a Satanás o prevenir a Satanás de que haga algo o que alcance un fin, no sólo es que Él nunca se rindió a Satanás sino que también causa que Satanás y sus huestes se rindan a Él. No es sólo lo que Satanás no puede hacer; en lo que Él le puede hacer a Satanás. Y eso es lo que vemos aquí.
Hemos visto la perfección de Cristo en Su tentación. Él nunca se rindió. Ahora vemos el poder de Cristo, Él hace que los demonios se rindan a Él. Entonces, está el poder de resistencia y está el poder de vencimiento de Cristo mostrándonos ambas dimensiones de Su capacidad de enfrentar al reino de las tinieblas. No sé si usted entienda lo importante que es esto. Quizás ha olvidado 1 Juan 3:8 que dice: “Para esto el Hijo del Hombre fue manifiesto.” Ahora, si usted oye eso como una introducción a un versículo, debe tomar nota de esto. Ésta es la razón por la que el hijo de Dios fue manifiesto. Aquí está: para que destruyera las obras del diablo. En otras palabras, nuestro Señor vino al mundo para destruir las obras del diablo. Y en últimas, cuando Él establezca su Reino, eso es exactamente lo que sucederá. Él va a encarcelar a Satanás y a todas sus huestes demoníacas durante un Reino de mil años al final del cual los congregará para ser atormentados eternamente. Él ha venido a destruir permanentemente las obras del diablo. Y al echar fuera demonios a lo largo de Su ministerio, Él estaba dando muestras de ese gran poder.
De hecho, en una ocasión dijo esto: “Si yo verdaderamente hecho fuera demonios, entonces el Reino de Dios ha venido;” y lo dijo en Lucas 11. ¿Por qué? Porque una de las marcas del Reino sería la derrota de Satanás y Él está diciendo ‘si me ven haciendo eso, saben que el Reino ya vino.’
Entonces, Cristo vino al mundo para destruir las obras del diablo. Y Mateo quiere que veamos el poder que Él tiene para hacer eso y de esta manera, bajo la inspiración del Espíritu Santo, registra esta tremenda obra de Cristo en el octavo capítulo de Mateo.
Ahora, permítanme añadir un par de pensamientos adicionales antes de que veamos específicamente el texto. Los discípulos mismos estaban conscientes de que esto no era fácil. De hecho, en Mateo 17:19, aunque el Señor los había comisionado para hacer esto, regresaron y dijeron que no podían hacer eso. Que no podían hacer que los demonios les respondieran. Entonces, ellos sabían que tenían problemas en sí mismos haciéndolo. Aunque ellos habían sido comisionados por el Señor, esto no es algo fácil de hacer; y no debemos suponer que debido a que el Señor lo hizo con tanta facilidad es fácil para nosotros. Hay gente en la actualidad que piensa que puede andar por todos lados con pequeñas fórmulas y echar fuera demonios. Están engañados. En primer lugar, no tienen dicho don apostólico. No es algo fácil.
Además, los judíos estuvieron involucrados en exorcismos. Los judíos mismos estuvieron involucrados en esfuerzos por echar fuera demonios. Tenían fórmulas y cosas que implementaban, rituales. De acuerdo con el onceavo capítulo de Lucas, Jesús inclusive les dijo: “¿por quién echan fuera sus hijos a los demonios?” Encontramos a algunos así en el libro de Hechos, quienes andaban por varios lugares tratando de echar fuera demonios. Ahora, ellos lo hicieron con temor, lo hicieron con un sentido de terror, lo hicieron con un sentido de preocupación, lo hicieron frecuentemente casi con un fracaso total; y entonces, cuando Jesús vino y comenzó a oír, la Biblia dice que ellos literalmente se asombraron de que Él pudiera echar demonios de tal manera.
Por ejemplo, en Marcos 1:27 dice: “Y todos se asombraron, de tal manera que discutían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es esta, que con autoridad manda aun a los espíritus inmundos, y le obedecen?” Como pueden ver, no es sólo que Él los echaba fuera, ellos pudieron haber tenido éxito con eso en algún momento si realmente eran personas piadosas genuinas, no sólo lo hacía sino que era la facilidad con la que lo hacía. Era la autoridad absoluta con la que lo hizo. Era el poder con el cual Él hizo lo que los asombró. De hecho, era tan fácil y lo hizo con tal poder que ellos concluyeron que realmente estaba en complicidad con los demonios y que todo esto era una farsa.
Se acuerdan en Lucas 11, dijeron que Él echa fuera demonios por el poder del príncipe de los demonios. Esta es una farsa, no pueden ser engañados. Éste hombre es del diablo mismo, sólo si estuviera en colaboración podría tener tanta cooperación. Entonces, no era tan sólo que lo hizo sino que lo hice instantáneamente con autoridad absoluta y total que iba mucho más allá de lo que ellos jamás habían visto en su propia experiencia humana; y los impresionó, los dejó boquiabiertos, los sorprendió.
Ahora recuerde, Mateo quiere que veamos que Cristo es el que puede revertir la maldición y establecer el Reino; y entonces, Mateo nos muestra ejemplos de Su poder. Uno que va a traer el Reino de Dios debe tener la capacidad de enfrentar la enfermedad de esta manera; y Jesús debe hacer esto. Debe ser capaz de enfrentar las fuerzas de la naturaleza y Jesús lo hizo cuando calmó el mar, el último milagro que Mateo registró. Él debe tener la capacidad de enfrentar el pecado y ese sería el punto del milagro en el capítulo 9. Él debe tener la capacidad de vencer la muerte y eso también se ve ilustrado en el capítulo 9. Y aquí, Él debe tener la capacidad de conquistar a los demonios. Entonces, Mateo nos está dando esto nueve milagros en los capítulos 8 y 9 para mostrarnos todas las facetas del gran poder glorioso de Cristo.
Ahora, veamos al pasaje en particular. Tres palabras clave: posesión, poder y perspectiva abren el pasaje para nosotros. Posesión por los demonios, poder por Cristo y la perspectiva de la gente. Estas son las tres cosas que vemos. Ahora, al llegar a la historia, al enfocarnos en la historia, Jesús ha cruzado el lago de Galilea en una pequeña barca con algunos discípulos. Ha habido otras barcas que lo han seguido conforme llegaron de Capernaúm.
Dejaron Capernaúm después de un día ocupado, el día de reposo, un día de sanidades. Ya cuando habían salido, a la mitad del lago de Galilea, la noche había caído y se levantó una tormenta. Y Jesús calmó la tormenta. Y en lugar de esto, dejó una calma en el agua después de que dijo “enmudece” a la tormenta. Y habían terminado su viaje a la costa este; y quizás es el amanecer del nuevo día. Y amanece tan temprano en esa parte del mundo que podrían ser las 4.45 de la mañana. Y en el amanecer de ese nuevo día, estas pequeñas barcas llegan a la costa e inmediatamente son enfrentadas con una situación increíble.
Observe el versículo 28, la recepción por parte de los demonios, la recepción por parte de los demonios. “Cuando llegó a la otra orilla, a la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.” Notarán que dice que llegó al otro lado. El otro lado es el otro lado del mar de Galilea. Al país, a la tierra de los gadarenos.
Ahora, esto ha causado algo de confusión en algunos porque aquí dice gadarenos, Marcos dice que eran gerasenos y Lucas dice gergesenos. Ahora, ¿son los gadarenos, los gerasenos o los gergesenos? Usted dice que en realidad no le importa. Y quizás no. Pero queremos asegurarnos de que las Escrituras son precisas, ¿no es cierto? La mejor manera de entenderla es simplemente esta: en la costa noreste del mar de Galilea, hay una pequeña villa llamada Gergesa. Esa villa estaba a unas seis millas de Capernaúm, al otro lado, en la parte norte. Una villa insignificante, pero la topografía de la tierra y la ubicación geográfica encajan con la historia aquí. Allí hay riscos que se precipitan al mar en donde un hato de cerdos podía venir y caer hasta matarse. Encaja con la geografía. La ciudad de Gadara, la cual parece ser la indicación de Mateo, está mucho más al sur y más lejos del mar; y realmente no encaja con el contexto.
Entonces, algunos han dicho que Marcos al decir que Geraza y Lucas al decir Gergesa probablemente se refieren a Gergesa y están en lo correcto, pero Mateo estaba equivocado porque dice Gadara y está equivocado porque este es un lugar diferente. La mejor solución simplemente es esta: Marcos y Lucas señalan la villa, Mateo señala el área entera; y esa es la razón por la que dice en la región de los gadarenos. Gadara era la ciudad principal y sus suburbios, aunque la ciudad principal estaba más lejos de la costa, los suburbios llegaban hasta la costa y bien podría haberle dado su nombre al área entera. Entonces, en el país de los gadarenos, cerca de la villa de Gergesa, de la manera en la que usted quiera pronunciarlo está bien, llegaron. Y por cierto, no sólo aterrizaron en cualquier lugar. Esto era por designio Divino.
Y entonces, las pequeñas barcas llegan a la costa, “y vinieron a su encuentro dos endemoniados.” Marcos y Lucas sólo nos presentan a uno de los dos porque para sus propósitos se concentran en ese. No obstante, ninguno de ellos está diciendo que sólo hubo uno. Es obvio que había dos. Uno era la persona principal con quien el diálogo de Marcos 5 se lleva a cabo; pero Mateo nos dice que hubo dos, los otros escritores se enfocan en el que era el vocero; y fue el punto primordial de atención.
¿Ahora, qué significa estar endemoniado? La palabra griega es sólo una palabra. Significa estar demonizado, demonizado, estar demonizado. ¿Qué significa ser endemoniado o demonizado? Cuando decimos hoy en día que está poseído por demonios, ¿qué queremos decir con eso? Bueno, algunas personas dicen que si estás obsesionado, es una cosa. Si estás oprimido, es algo. Si estás poseído, es otra cosa. Si tú eres así, es así; pero la Biblia nunca hace esas distinciones claras. Ser demonizado significa estar bajo el control de demonios, sea que están adentro de aquí o afuera de tu oído o adelante, atrás, arriba, abajo, no lo sé, pero puedes volverte muy quisquilloso acerca de esto y no ser muy definido. Ser demonizando significa estar bajo el control de los demonios.
Ahora, los demonios pueden hacerle muchas cosas a la gente. Eso lo sabemos. Pueden tentar, y esto es lo que le hacen a las personas: las tientan. Ahora en un sentido, para tentar tienen que entrar en nuestras mentes para que nuestros pensamientos se sientan atraídos en cierta dirección. Ellos pueden traer enfermedad. Pablo llamó al desorden que tenía, el aguijón en la carne, un mensajero de Satanás enviado para abofetearme. Entonces, los demonios pueden atacar lo físico, pueden atacar lo espiritual, pueden atacar lo mental porque la Biblia nos dice que las doctrinas de demonios son propagadas, perversiones de la Verdad para distraer y llevar a la gente a la idolatría y al error.
La Biblia, al delinear esas áreas de lo físico y lo mental nos dice por ejemplo, de lo físico, tenemos ilustraciones en el Nuevo Testamento de demonios trayendo una incapacidad a la persona de hablar en Mateo 9; trayendo ceguera, Mateo 12; trayendo una deformidad física, Lucas 13; trayendo epilepsia, Mateo 17. Pueden atacar lo físico. También pueden atacar, como he dicho, lo mental, la mente. Pueden causar locura, como lo hacen en este caso. Pueden traer una obsesión por el suicidio como en Marcos capítulo 9, en donde el individuo que estaba poseído por demonios intenta continuamente matarse a sí mismo. Pueden traer masoquismo, como en este caso, en donde Marcos 5 dice que el demoníaco se cortaba y lastimaba su carne con piedras afiladas. E inclusive pueden causar homicidio, como en los capítulos 9 y 18 de Apocalipsis. Entonces, pueden afectar el cuerpo y pueden afectar la mente.
Además, pueden atacar la dimensión espiritual. Ellos corrompen la Verdad, traen la religión falsa, prácticas ocultas, todo tipo de conducta inmoral. Siempre producen consecuencias malas, viles. Ahora, permítame ver si puedo darle una definición de posesión demoníaca que le ayudará. Y por cierto, si usted trata de entender esto por completo, estará perdiendo su tiempo, porque tiene que reconocer que es una realidad sobrenatural; y no podemos ir más allá de lo que la Biblia nos enseña para comprenderlo. Pero una definición que le puede ayudar: la posesión demoníaca es una condición en la que uno o más demonios habitan el cuerpo de un ser humano y pueden controlar de manera deliberada a ese ser. Eso es posesión demoníaca.
Puede haber todo tipo de grados diferentes, diferentes manifestaciones; pero eso es lo que significa en esencia. Y por cierto, la palabra daimonizomenous es usada 12 veces en el Nuevo Testamento. Significa ser demonizado y nuestro Señor lo reconoce. La Biblia reconoce esto como una realidad. De hecho, en la Iglesia temprana, los dones de milagros son los dones de dunimis, poderes, era la capacidad de echar fuera demonios. Era un problema grande en la vida humana. Un comentario al margen que siempre me cautiva, en todos los incidentes de demonización en el Nuevo Testamento, ninguno de ellos jamás ocurrió o ninguno de ellos jamás se registra que haya ocurrido en la ciudad de Jerusalén. Y no sé exactamente si eso es algo importante, pero parece ser que conforme usted ve que ninguno de ellos ocurrió en Jerusalén y el resto de ellos ocurrió en áreas rurales, que Satanás, en cierta manera, se adapta a sí mismo a la sofisticación de cualquier elemento dado de la sociedad.
Por ejemplo, los misioneros vienen a casa y nos cuentan de estos casos muy comunes de posesión demoníaca que nos parecen bastante raros. Por ejemplo, en mi propia vida sólo una vez realmente he estado involucrado en la vida de un individuo poseído por demonios al punto en el que de hecho hablé con siete demonios diferentes hablando a través de este individuo. Esa es la única vez que jamás ha pasado. Ahora, si estuviera buscando y tratara de encontrarlo, quizás sería más frecuente. Pero no es algo común en una sociedad sofisticada. Satanás opera en otras maneras, pero de una manera menos sofisticada, más terrenal. Esto parece ser más común.
Por ejemplo, en donde hay religión pagana hay temor; porque todos los dioses de los paganos son dioses que tienen elementos malos en su naturaleza y por lo tanto tienen que ser apaciguados. Y cuando esos dioses se manifiestan a sí mismos en maneras malas, infunden temor en la gente y alcanzan sus objetivos. Cuando la gente en nuestra sociedad actúa como si los encerramos en una pequeña caja y los alejamos de la sociedad. Los sacamos, los encarcelamos, los escondemos en algún lugar y queremos ignorarlos. Entonces, no tienen el impacto en nuestra sociedad que tendrían si fueran un poco más sutiles, por así decirlo. Pero, en este contexto muy rural estos maníacos estaban causando destrozos.
Veamos más de cerca estas dos pobres almas. Permítame añadir este pensamiento. En la posesión demoníaca, la personalidad del demonio eclipsa la personalidad del que es poseído. En el relato de Marcos, cuando Jesús dice a esta persona: “¿cuál es tu nombre?” el demonio responde: “mi nombre es legión.” En otras palabras, hay muchos de nosotros. La persona ni siquiera puede hablar. En esta ocasión, me pasó que estaba hablándole a esa mujer que tenía estos demonios; y cuando hice una pregunta por lo menos escuché siete voces diferentes. Y las siete de ellas tenía cada una nombres diferentes; ella ni siquiera podía hablar en su propia voz. Y eso es esencialmente lo que usted tiene en ese caso.
La posesión demoniaca significa la proyección automática de una nueva personalidad, intensamente mala que eclipsa la personalidad del individuo. Ahora puede venir y entrar; puede ser constante. Estoy seguro que muchas personas en nuestra sociedad que son diagnosticadas como mentalmente enfermos realmente están poseídas. Y si me permite decirlo, la solución para ellos es la misma que fue en ese entonces. El único que tiene poder sobre los demonios es el Señor Jesucristo.
Observe dónde están viviendo estas almas pobres en el versículo 28. Ellos están saliendo de los sepulcros. ¿Se puede imaginar? Digo, si yo me acerco a un cementerio de noche caminando por la calle y me da miedo, pero ¿vivir en las tumbas? Para el judío, la contaminación número uno de todas las contaminaciones era tocar un cuerpo muerto. ¿Qué tan lejos ha llegado estas pobres almas que han sido alejadas y viven en los sepulcros, en las tumbas?
Y por cierto, en esa área en donde los riscos son altos en la costa oriental del mar de Galilea, naturalmente tenían ahí unas cámaras hechas por hombres a partir de las rocas para ser usadas como tumbas; y ahí estaban viviendo en las tumbas. Y dice que eran feroces en gran manera. Eso significa violentos. Eran maníacos salvajes; y si estudia otros relatos, nos dice más de eso.
En Lucas 8:27 nos dice que no usaban ropa. Estaban totalmente desnudos. Ahora escuchen, sé que la gente viene y dice que eso no tiene nada de malo. Bueno, en la Biblia, las únicas personas que andaban por todos lados desnudas eran maníacos, si eso le ayuda. No tenían sentido de equilibrio social. No tenían sentido de modestia. Eran maníacos salvajes. En Marcos 5 dice que “trataron de atarlos con cadenas y no importa lo fuerte es que eran las cadenas, rompían las cadenas.” Tenían una cantidad tremenda de fuerza.
Nunca olvidaré a la niña con la que estábamos tratando, quien con dos dedos volteó el escritorio de metal sobre uno de los hombres que estaba ahí. ¡Una fuerza tremenda! Y Marcos 5 dice que estaban haciendo ruido y cortándose y lastimándose con piedras afiladas. Y estaban gritando fuertemente. Y dice que era un grito inexpresable, no coherente. Ahora, usted entiende lo que está pasando, ¿no es cierto? Están totalmente desnudos, cortándose con piedras, gritando, están por el área del monte con una fuerza increíble y como resultado, dice que nadie pasaba por ahí. Bueno, eso espero. Nadie se atrevería a ir por ahí. Nadie podía pasar por ahí. Tan pronto como ellos lo hacían, salían de las tumbas gritando.
¿Y sabe lo que sucedió? La acogida de los demonios, vieron las pequeñas barcas y que estaban listas para hacer su número. Y vinieron de fuera de las cuevas gritando, bajando por el monte y de pronto, algo sucedió; y no sólo vemos la recepción por los demonios sino también el reconocimiento de los demonios. Versículo 29: “Clamaron diciendo: “¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios?”” Deténgase ahí. Lo que realmente significan en el griego es ¿por qué nos estás molestando? ¿Por qué estás aquí? ¿Sabe por qué dice eso Marcos?
En Marcos 5:6 dice: “Cuando vieron a Jesús le adoraron,” se postraron, se postraron a sí mismos, lo adoraron. Increíble que adoraran a Jesús. Lo hicieron. Proskuneo quiere decir besar la mano, reverenciar con las rodillas, con la cabeza en el piso. Es una palabra de profundo asombro, reverencia, respeto y adoración. Usted preguntará por qué están haciendo eso. Porque sabe exactamente quien Él es. Escuche, los demonios son ángeles caídos. En una ocasión fueron ángeles santos, antes de que entraran en la rebelión de Satanás; y estaban involucrados con Dios. Y ellos conocen a la Segunda Persona de la Trinidad. Nadie necesita ayudarles con su cristología. Y ellos sabían que Él era su antagonista y era su juez y era su destructor. Y le dicen: “¿por qué estás aquí para molestarnos? ¿Has venido para atormentarnos antes del tiempo?” Inclusive su escatología era correcta. Ellos expresaron que estaba ahí muy temprano. Eran demonios pre tribulacionistas, pre milenialistas. Éste no es el tiempo. Estás fuera de tiempo. ¿Estás aquí para atormentarnos antes del tiempo?
Piensen en esto, estos seres están condenados por toda la eternidad; y lo saben. Y ellos desprecian a Jesús, lo odian, lo aborrecen; y sin embargo lo adoran porque se ven forzados a hacerlo por Su poder. No pueden resistirlo. Como puede ver, ellos conoces Filipenses 2:10, que Él debe ser adorado y toda rodilla se doblará, no sólo las cosas que están arriba de la tierra y en la tierra sino las cosas que están debajo de la tierra.
Ellos sabían intuitivamente que estaban ante la presencia del Segundo Miembro de la Trinidad. Sabían intuitivamente que estaban allí con el Santo de Dios que tenía el poder para destruirlos y dijeron ‘esto no puede ser.’ Inclusive el tiempo está mal. Inclusive ellos conocen el plan redentor. Escuche, son mejores teólogos que la mayoría de la gente. Ellos saben que éste es Cristo, el Hijo de Dios viviente. Sé que algunas sectas ni siquiera saben los que los demonios saben. Y saben cuál era el plan escatológico. Y sabían que iban a ser condenados para siempre.
Entonces, doblan la rodilla a Cristo. Su juez. Qué fascinante es esto para mí. Me impresiona esto. También podría mostrar el hecho de que algunas veces los demonios, a través de mediums y otros, parecen tener la capacidad de predecir el futuro. Podría ser que de alguna manera ya han sido conscientes. Tienen algo de conocimiento del plan Divino y en algunos puntos, pueden adelantar lo que va a venir. Están mucho más adelante de los discípulos del Señor. El libro de Apocalipsis no ha sido escrito; los discípulos no estaban muy seguros de cuándo todo esto iba a suceder, pero ellos sabían.
Me parece interesante, miren nuevamente el versículo 29, que se dirigen a Él como Jesús, el Hijo de Dios. ¡Qué declaración tan importante! ¿Sabe que Hijo de Dios es un término que es sinónimo a Mesías? En Mateo 16:16: “Tú eres, dijo Pedro, el Mesías, el Hijo del Dios viviente.” Y dijo el Padre a través de Pedro. Esa fue la revelación de Dios de que el Mesías es el Hijo del Dios viviente. Y entonces, cuando dicen ‘Tú eres el Hijo de Dios,’ estaban diciendo Tú eres el Rey, Tú eres el Mesías, Tú eres el Ungido, Tú eres el Cristo. No debe sorprendernos esto. Santiago 2:19 dice: “los demonios también creen y tiemblan,” porque conocen el resultado. Ellos saben lo que va a suceder.
En Lucas 4:41, permítanme leerle un versículo ahí. Dice esto: “Y los demonios también salieron de muchos clamando,” y aquí esta lo que los demonios dijeron: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, porque ellos sabían que Él era el Cristo.” Es grandioso, ellos sabían, ellos sabían; y sabían que estaban condenados al tormento del infierno eterno. ¿Cómo iban a escapar? No creo que ellos pensaran que podían escapar. Ellos conocían el poder de Dios. Usted preguntará entonces, ¿por qué atacaron a Cristo? ¿Por qué lo tentaron a Cristo?
¿Sabe usted lo que yo creo en mi propia necedad? Probablemente pensaron que podían arrastrar a Cristo un poco con ellos al abismo. Ellos, si tan sólo lo pudieran pecar, lo odiaban tanto, quizás podían arrastrarlo al abismo. Ellos no podían tocarlo en Su divinidad pero quizás podían atacarlo en Su humanidad. Pero no pudieron. Y siguiendo su recepción y reconocimiento, llegamos a su requisición en el versículo 30.
Y hacen una petición y es absurda. “Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos. Y los demonios le rogaron diciendo: “si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos.”” ¡Que petición tan extraña! ¿De qué sirve eso, un cerdo poseído por un demonio? Un cerdo es un cerdo, ¿no es cierto? ¿Cómo distingues a un cerdo poseído de un demonio de cualquier cerdo. ¿Cuál es el punto? Quizás los demonios necesitan estar en algo.
Bueno, probablemente es verdad. Quizás sí, pero de nuevo no sabemos por qué pidieron esto. Quizás querían tener algún lugar. Quizás pensaron que era una concesión agradable. Si no quieres que estemos lastimando a la gente, vamos a estar contentos con entrar a los cerdos, pero por favor no nos envíes al abismo. Temen a Cristo. Están en asombro de Él. No quieren ir al abismo. Sólo colócanos en un lugar menos preciado y lo menos preciado en lo que pudieron pensar eran cerdos, porque francamente no eran kosher. Y no debían haber estado cuidando de cerdos en esa parte del país.
Ahora, eso es parte del estándar judío hasta el día de hoy. No había sido abrogado y es muy probable que algunas personas judías fueran dueños de esos cerdos; y eso estaba en desobediencia a la ley de Dios. Por cierto, Marcos 5:13 dice que había 2000 de ellos en el hato, por lo que era un hato grande de cerdos. Entonces, debió haber habido muchos demonios. Dicen: ‘iremos al hato de cerdos,’ y realmente es todo lo que sabemos. Sólo podemos especular en lo que están pensando. Y quizás pensaron que entrarían a los cerdos y en cierta manera evadirían el foso. Quizás pensaron, estoy seguro que pensaron eso, pero quizás pensaron que matarían a los cerdos y todo el mundo se enojaría contra Jesús y matarían a Jesús por matar a los cerdos. Pero, fuera lo que fuera lo que tenían en mente, tienen su plan; pero es interesante que en la respuesta de Jesús pasamos de la posesión de los demonios al poder de Cristo en el versículo 32.
Y ahora, quitamos el foco de los demonios y nos vamos a Cristo. Él les dijo: “Id.” ¿Quiere saber algo? Cuando los hombres tratan de echar fuera demonios, les cuesta trabajo que los demonios cooperen. Cuando Cristo viene, ellos quieren ir. Lo único que quieren saber es adónde se les permite ir. Y Él dijo: “Id.” Y ellos salieron y se fueron a aquel hato de cerdos y he aquí, todo el hato de cerdos se precipitó en el mar por un despeñadero y perecieron en las aguas.” Todos se aventaron ahí por el despeñadero y cayeron en el mar y se ahogaron, los 2000 cerdos.
Algunas personas enojan por este milagro, porque creen que Jesús fue cruel con los animales. No sé si piensan así mientras que están comiéndose un sándwich de jamón o no, pero los animales, en esencia, son creados para ser consumidos tarde o temprano. Bien pudo haber sido que había muchas personas ocupadas ahí que estaban tratando de sacar a esos cerdos del agua para que los pudieran cocinar, no sé. Pero de cualquier manera, el hato entero cometió un suicidio masivo.
Ahora, quiero que piense en esto por un momento, en cómo es que Él echó fuera todos esos demonios. Él dijo “Id.” Eso es todo. Cuando Él apareció, ellos querían irse. Y Él les mando que se fueran. ‘Id.’ Una palabra. Eso es lo que impresionó a todo el mundo. No es lo que hizo, fue cómo lo hizo. Total e instantáneamente. Y usted tiene que entender que los demonios son seres poderosos, muy poderosos. Los hombres no pueden enfrentarlos. No podemos enfrentarlos a nivel sobrenatural. Es tan torpe para la gente andar por todos lados pensando que pueden echar fuera demonios por su inteligencia. Los demonios están mucho más adelantados que usted en eso.
En 2 Pedro 2:11 dice que los ángeles son mayores en poder que los hombres. En el Salmo 103, que leí esta mañana, dice que los ángeles exceden en fortaleza. Preguntará entonces si los demonios son tan poderosos como los ángeles santos. Bueno, en un sentido deben serlo porque en Daniel hemos visto en el capítulo 10 que un ángel santo vino con un mensaje despachado de Dios a Daniel, pero un demonio lo detuvo ahí por tres semanas y Dios tuvo que enviar a Miguel para dejarlo ir. Son poderosos. De hecho, en Efesios 6, dice que si vamos a enfrentarlos, tenemos que ponernos la armadura de Dios. Tenemos que ser fuertes en su poder. Los demonios son poderosos.
Un ángel santo, en 2 Reyes 19:35, dice que mató a 185,000 asirios en una noche. Entonces, están muy por encima de los hombres. Tienen inteligencia superior, eso es obvio a partir de Ezequiel 28; tienen una fortaleza superior, puede verlo aquí con este maníaco en Marcos 5, estaban rompiendo las cadenas, lo puede ver en Hechos 19, Mateo 17. Tienen poder superior. Pueden hacer señales y maravillas de acuerdo con Tesalonicenses capítulo 2, tienen un espectro superior, esto es que ellos pueden trasladarse cruzando los cielos de acuerdo con Daniel 10. Tienen experiencia superior, han vivido antes de la creación del hombre. Han estado viviendo a lo largo de los anales de la historia humana. Han estado viviendo por mucho tiempo y saben para qué existen y entienden cómo los hombres funcionan y piensan. Tienen una naturaleza superior. Son seres espirituales, no están ligados o confinados por forma alguna y entonces éstas son criaturas increíbles. Sólo el Señor Jesucristo podía aplastar la cabeza de la serpiente, sólo el Señor Jesucristo puede arrojarlos al foso, y, en Apocalipsis 20, sólo Él puede lidiar con ellos ahí. Y entonces, les concede su petición; pero no por su causa sino por causa de Él. Él los envía a ese hato de cerdos.
La gente se pregunta por qué hizo eso. Algunas personas dicen que porque no deberían haber estado criando cerdos y esa fue una buena lección. Bueno, no creo que la lección sea esa aquí. No creo que la lección sea si debes o no criar cerdos. No creo que esa sea la lección. La lección aquí es que Cristo puede echar fuera los demonios.
Ahora, si Él dice “id”, ¿cómo van a saber que se fueron a algún lugar? ¿Cómo van a saber que ellos se fueron a algún lugar? Envíalos a alguien más y tienes el problema de nuevo. Tienes otro hombre poseído por demonios. ¿Cómo vas a demostrar que se fueron? Simplemente ve un acto que normalmente es pacífico, un hato de cerdos normalmente es pacífico. Los cerdos usualmente no nadan y no van a todos lados juntos, no son como las ovejas. Ahora, si observa que 2000 de ellos corrieron hacia un despeñadero, cayendo, entrando al agua y ahogándose; y la conclusión es que algo sobrenatural acaba de suceder. Y en esa misma milésima de segundo te volteas y los dos individuos demonizados están sentados y como dice Marcos: “sentados y en su juicio cabal, teniendo una conversación maravillosa con Jesús,” la conexión se hace rápidamente.
Como verá, lo que puede ver que hizo fue una demostración viva de la liberación de esos dos hombres que nadie jamás olvidaría. Al mismo tiempo, demostraba la naturaleza destructiva de los demonios. Ya que cuando los demonios llegan a esos cerdos, instantáneamente fueron todos destruidos. Y creo que les dio a los demonios un adelanto de su propia destrucción venidera. Y si usted está preocupado por los cerdos, no entendió el punto. Hay muchos más cerdos. Podemos sacrificar unos cuantos miles de cerdos para Jesús para mantener esta demostración de poder increíble. Yo creo que Él quería una prueba viviente de que esos demonios salieron de esos hombres y los envió a esos animales para que esos animales pudiera ser una demostración que nunca nadie olvidaría.
Y eso nos lleva al punto final, la perspectiva de la gente. ¿Cómo reaccionaron? ¿Cómo reaccionaron? Dicen en el versículo 32, un comentario al margen interesante, “se precipitó en el mar por un despeñadero, y perecieron en las aguas.” El mismo pensamiento que en el versículo 28, que la gente poseída por demonios era feroz en gran manera. La ferocidad y la violencia fueron transferidas a los cerdos y debió haber habido una conducta maníaca en esos cerdos como había habido en esos hombres; y entonces era clara la relación en las mentes de las personas de lo que había sucedido.
Versículo 33: “y los que los apacentaban huyeron.” Ahora, estos no son los dueños. Simplemente son los pastores, los que están cuidando a los cerdos; y la gente que cuidaba de los cerdos ahí en los montes. Y cuando vieron que los cerdos habían cometido un suicidio en masa, salieron corriendo por ese monte como maníacos al agua, se fueron a la ciudad, huyeron, se apuraron, corrieron los más rápido que pudieron y contaron todos lo que había pasado y todo lo que le había pasado a los cerdos. ¿Es eso lo que dice? O no, lo que les pasó ¿a quiénes? A los poseídos con demonios. En otras palabras, ellos entendieron el mensaje. Los cerdos no eran el punto; el punto era que los hombres fueron librados de los demonios. Los cerdos sólo fueron la prueba, eso es todo.
Y entonces, entraron “…y viniendo a la ciudad, contaron todas las cosas, y lo que había pasado con los endemoniados.” ¿No es eso maravilloso? Versículo 34: “Y toda la ciudad salió al encuentro de Jesús;” Este es un verdadero avivamiento. Están ahí todos los hombres sentados con sus mentes cabales, conversando con el Señor. ¿Cómo reaccionaron? Vino la ciudad entera. Y cuando le vieron, lo adoraron. No, francamente un paso atrás de los demonios. “Le rogaron que se fuera de sus contornos.” ¡Salte! ¡Salte! ¿Por qué dicen eso? Todo comentario que leí decía porque estaban más preocupados por sus cerdos que con Jesús. Porque eran materialistas consumados. Queremos a nuestros cerdos, cómo te atreves a hacer esto, en lugar de estar preocupados acerca del alma de estos dos hombres demonizados. Pero esas no son las respuestas correctas.
¿Quiere saber algo? No dicen nada de los dueños de los cerdos. Ninguno de los tres registros dice algo acerca de la reacción de los dueños los cerdos. Éstos no son los dueños de los cerdos. Esta es la ciudad entera; y la ciudad entera salió y cuando lo vieron, le dijeron ‘vete.’ ¿Por qué? Marcos 15: “Y tuvieron miedo.” Ellos no estaban enojados, ellos estaban aterrados.
En Lucas 8:37, el mismo relato: “Estaban abrumados de pánico.” Ahora, si usted ha estado con nosotros en las últimas semanas, usted sabe lo que esto está diciendo. Está diciendo lo mismo una y otra vez. Cuando el hombre impío enfrenta a un Dios santo, está aterrado. Estamos de regreso en Isaías 6. ¡Ay de mí! Ay, es la palabra de una maldición. Isaías, el mejor hombre en la tierra pronunció una maldición a sí mismo cuando vio a Dios, porque su impiedad fue expuesta.
Pedro, cuando vio a Jesucristo en la majestad de Su poder, dijo ‘apártate de mí, porque soy pecador, oh, Señor.’ Y la semana pasada, le expliqué cómo cuando vino la tormenta tenían miedo; y cuando Jesús calmó la tormenta tenían aún más miedo. Tenían más miedo de la calma de lo que tenían de la tormenta porque sabían que Dios estaba en su barca y ellos estaban asombrados ante Dios. Ellos vieron lo sobrenatural y los aterró. Ellos vieron a Uno que podía controlar los demonios. Vieron a Uno que podía controlar los animales. Vieron a uno que podía tomar el alma de un hombre y devolvérsela tan blanca y pura como la nieve; y estaban aterrados. Ellos vieron a Dios. Eso es lo que vieron. No sé si todos entendieron eso, pero sabían que era sobrenatural. Y a los hombres no les gusta eso. Los hace sentir incómodos. ‘Devuélvenos a nuestros cerdos y vete.’ Los hombres pueden manejar a cerdos, pero no pueden manejar a Dios. El misterio de lo sobrenatural es algo que no pueden manejar.
Por cierto, éste es el primer ejemplo registrado de oposición abierta al Mesías y todo va creciendo de aquí en adelante. Él los exhibió. Ellos lo menospreciaron. Él era mejor que ellos, más grande que ellos, más puro que ellos, más poderoso que ellos, más santo que ellos; y ellos resintieron eso. No les gustó. Se sintieron sucios e inadecuados en Su presencia porque Él era tan santo y ellos se sintieron tan impotentes. En un sentido humano simplista, R. C. Sproul hace esta comparación interesante en este tipo de pensamiento. Él dice: “Es como el libro de Pedro, el principio. ¿Se acuerdan del libro El principio de Pedro? Dice que en la industria, en esencia, todo el mundo alcanza el nivel de su incompetencia. En otras palabras, tú haces bien al nivel A y entonces te promueven al nivel B; y haces bien al B y T promueven al C y pronto estás al nivel en el que ya no puedes funcionar. Y entonces, todo el mundo se eleva al nivel de la incompetencia y eso es, en esencia, lo que toda industria y todas las jerarquías hacen; y es dirigida por una grupo de gente incompetente.
Pero él también ilustra en ese mismo libro otra dimensión. Él habla de gente que es incompetente y dice que hay algunas personas que simplemente son incompetentes. No se elevan al nivel de la incompetencia porque son incompetentes para empezar. Y él dice que sólo encajan en organizaciones y duran por mucho tiempo porque no amenazan a nadie. Simplemente son incompetentes. Entonces, él dice que el primer principio dice de la jerarquía es que la jerarquía debe permanecer en pie; y si todo el mundo en la jerarquía dice que la jerarquía debe mantenerse en pie, es maravilloso tener incompetencia porque entonces no hay amenaza en contra de la jerarquía.
Pero después, él dice que llega el hombre que es súper competente, que a nadie le cae bien porque todo el mundo se siente amenazado y no puede subir en la administración de la industria porque amenaza a todo el mundo por sobre él. Y la única manera en la que sube es de manera lateral. Y él tiene que ir de una organización a otra porque no puede elevarse en su organización ya que es una amenaza para todo el mundo. A la gente no le gusta la súper competencia.
Es como el niño, cuando todo el mundo en el grupo sacó 32 y menos y una pequeña niña sacó 100 y sabes que la prueba fue justa; y simplemente eran todos torpes. Todos salieron mal. Ella afectó la curva; y lo resientes. No te gusta. Bueno, si usted quiere decirlo de esta manera, Jesús afectó la curva. Arruinó la curva. No pudieron tolerar a Jesús por Su perfección. No podían tolerarlo debido a Su santidad absoluta. Él estaba mucho más allá de ellos y los desenmascaró, les mostró la torpeza de sus propias vidas. Y esa es la razón por la que tuvieron que matarlo. Y aquí comienza a crecer todo. Lo vieron, vieron el poder, estaban totalmente aterrados en asombro ante Dios. Y en lugar de postrarse en adoración, dijeron “Vete. No te queremos.”
La gente dice: “oh, si tan sólo pudiéramos ver los milagros, creeríamos.” Escuche, la gente que vio los milagros, no creyó. Lo clavaron a una Cruz y habían visto milagro, tras milagro, tras milagro. Y aun así, no creyeron. Eso simplemente los hizo odiarlo más y más y más. La gente piensa en la actualidad que si tan sólo se les pudiera mostrar a todos una pila de milagros, todos creerían. No. Porque algunas personas cuando son expuestas a la presencia del asombro de la majestad del Dios santo literalmente van a correr, porque aman sus tinieblas.
¿Alguna vez has levantado una roca y has encontrado muchos insectos que empiezan a correr, que han estado ahí por mucho tiempo y en cuanto los expones a la luz simplemente salen corriendo para buscar un hoyo? Así son los hombres. Expones a los hombres a la luz de Dios y aman sus tinieblas. Ellos regresan a la tierra para volverlo a encontrar. Ahí estaban estos hombres.
Pero Dios mostró mucha gracia a ellos. La historia termina en Marcos 5:19, el relato paralelo. Y tiene que escuchar estos versículos. Dice esto: “Al entrar Él en la barca, el que había estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con Él. Mas Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: ‘Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti.’ Y se fue, y comenzó a publicar en Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos se maravillaban.”
¿Sabe lo que él hizo? Esas personas que odiaban a Jesús, que querían que Jesús saliera de su país, nunca rompieron la compasión o misericordia de Jesús hacia ellos; y entonces él les dejó a este misionero y su amigo como una prueba viviente en medio de ellos de Su poder. Un misionero. ¡Qué maravilloso que la gracia de Cristo se extiende a aquellos que ni siquiera la quieren! Oremos.
Padre, no sabemos más acerca de la historia; entonces no sabemos qué tan eficaz fue el testimonio del hombre. Tenemos que creer que él fue el instrumento en la redención de otras almas. Te damos gracias por este gran registro de la prueba de Tu poder sobre Satanás. Sabemos que significa que Tú tienes poder sobre el pecado y la muerte, las herramientas que Satanás usa, que algún día, Tú vas a corregir esta tierra, este universo. Tú crearás un nuevo cielo y una nueva tierra para darnos cuerpos glorificados en donde ya no habrá más enfermedad, tristeza, lágrimas, lloro, dolor o muerte. Padre, vemos la majestad de Jesucristo sin duda alguna. Los demonios nos dan testimonio de que Él es el Hijo de Dios, de que Él viene como juez, de que Él va a condenar al infierno a los impíos. Ese es el testimonio de los demonios y lo saben.
Que seamos sabios en saber también sin duda alguna que éste es el Cristo de Dios. Él es el juez, que sepamos también que los demonios nunca pueden conocer la gracia salvadora Él otorga. No le dijo al hombre que le dijera los demonios que dieran testimonio de ellos. Están más allá de la redención, pero, que le dijera a sus amigos. Porque el plan de salvación se extiende a los hombres. Dios, que escuchemos el mensaje de Cristo, el Libertador, y lleguemos a conocerlo y la gloria de Su Reino. Oramos en Su nombre. Amén.
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