El llegar al décimo capítulo lo he titulado La Visión Gloriosa, La Visión Gloriosa. Podríamos subtitularlo Los Visitantes Celestiales. Estos 21 versículos en este capítulo en particular son ricos, cargados de verdad. Tuve la oportunidad esta semana de leer unos 12 o más comentarios como normalmente lo hago, comentaristas del pasado y del presente que comentan acerca de libros de la Biblia. Y un comentarista en la conclusión de su explicación del décimo capítulo de Daniel dijo, él era de la opinión que no había nadie en este capítulo que realmente tenía valor alguno para la predicación. Y yo pensé cómo es posible que él pudiera llegar a esa conclusión, está más allá de mi capacidad porque tiene un valor tan tremendo para la predicación.
Permítame ver si puedo colocar el capítulo en su mente. Está en la naturaleza del hombre el estar limitado por el tiempo y el espacio. Somos cautivos del mundo natural, no tenemos capacidad de salir del mundo natural, no podemos salir, estamos encerrados, confinados. Entonces si vamos a ver e interactuar con el mundo divino de lo sobrenatural va a tener que venir a nosotros porque no podemos ir a él, Dios debe invadir el espacio y el tiempo porque nosotros no podemos salir. Y eso es exactamente lo que sucede en este capítulo, el cielo viene a la tierra en una serie sorprendente divisiones gloriosas. De hecho, en este capítulo Daniel es visitado desde el cielo por algunos seres increíbles que le dan la cuarta y la última de sus grandes revelaciones proféticas.
Ahora, en este libro de Daniel hay 4 revelación proféticas grandes, esta es la última y se estira desde el capítulo 10 hasta el capítulo 11 y hasta el capítulo 12, esta gran visión final llena y termina el libro. El capítulo 10 presenta la visión, el capítulo 11 da la profecía y el capítulo 12 añade un epílogo. Entonces ahora hemos llegado al fin de las cosas que están por venir que les son dados al Profeta Daniel. Ahora, la profecía que estaremos viendo en los capítulos 10 al 12 abarca el mismo periodo de tiempo como lo hace la profecía en el capítulo 8, se estira desde el día de Daniel hasta la gran tribulación y al regreso de Cristo. Se estira a lo largo del resto de la historia humana hasta que Cristo vuelve a venir. No obstante la profecía en los capítulos 10, 11 y 12 da más detalles acerca de la tribulación que cualquier otra profecía. En el capítulo previo, en el capítulo 9 del libro de Daniel, Daniel estaba leyendo en Jeremías, y Daniel estaba muy consciente de que Jeremías había profetizado que la cautividad de Israel únicamente duraría 70 años. Y recordara ahora que Daniel es un profeta en Babilonia, él está con los cautivos que han sido llevados de su tierra y su tierra ha sido destruida.
Pero Jeremías dijo que únicamente duraría 70 años, y entonces conforme Daniel estaba leyendo la profecía de Jeremías en el capítulo 9 él se encontró esas dos profecías en donde Jeremías dice que únicamente durará 70 años y él sabía que ya habían pasado casi 70 años desde que él había sido llevado cautivo y entonces él comienza a darse cuenta de que el tiempo debe estar llegando a su fin. Y entonces en el capítulo 9 él comenzó a ayunar y él comenzó a orar y él comenzó a confesar su pecado y él comenzó a pedirle a Dios que cumpliera la promesa de que los 70 años cumplirían con la disciplina y el pueblo pudiera regresar a su tierra. Esa fue su oración en el capítulo 9. Y recordará que al final del capítulo Dios le dio una profecía tremenda en respuesta a esa oración.
Ahora, esa oración en el capítulo 9 y la respuesta subsecuente de Dios ocurrieron en el primer año de Ciro el rey, el primer año del rey del imperio medo persa. Recordará que en ese primer año según Esdras capítulo 1 hasta Esdras capítulo 3, Ciro emitió un decreto y él dijo, “Todo el pueblo de Israel ahora puede regresar a casa. Todos pueden regresar.” La oración de Daniel fue respondida directamente en el año mismo en el que él hizo esa oración. ¿Pero sabe lo que sucedió? Al llegar al capítulo 10 cuál es la primera afirmación, en el año tercero de Ciro. ¿En dónde estamos ahora? 2 años después. ¿Y sabe una cosa? 2 años después una realidad muy desalentador ha ocurrido. ¿Quiere saber lo que es? El pueblo no regresó, estaban cómodos, habían sido lo suficientemente paganizados, estaban inmersos en la sociedad en la que vivían, eran prósperos, había sido absorbidos, estaban demasiado involucrados como para preocuparse por la tierra prometida, demasiados involucrados por la reconstrucción de Jerusalén, demasiado involucrados como para preocuparse por restaurar el templo. Dice usted, ¿acaso ninguno regreso? Unos cuantos. Esdras nos dice que 42,000 regresaron. Dice usted, “Bueno eso se oye como muchos.” Realmente no, habían floreció en Babilonia, habían muchos más que eso. Eso fue únicamente una gota en la cubeta. Únicamente 42,000 regresaron. Muchos habían nacido la cautividad, no regresaron. Los pocos que regresaron fueron guiados por un hombre llamado Zorobabel. Y Zorobabel estaba en la línea de David, él era de simiente real, y él no podía establecer de nuevo la monarquía. Él simplemente no lo pudo lograr. Él fue acompañado por un hombre llamado Josué, no el Josué de la antigüedad, sino Josué el sumo sacerdote quién iba a ser su líder espiritual.
Y cuando regresaron les tomó 7 meses simplemente para quitar lo que había quedado del templo, por no decir nada de la ciudad. Y como me comenzaron por tratar de reconstruir el templo enfrentaron oposición y fueron atacados y fueron objeto de burla y fueron odiados y finalmente se detuvo la obra en su totalidad.
Entonces cómo puedo ver toda la gran expectativa de Daniel no había sido cumplida, el gran sueño de su corazón era que 70 años después de que él había sido llevado cautivo la nación entera regresaría y reconstruiría el templo y reconstruiría la ciudad y reconstruirían los muros y reconstituirían su nación y su adoración y todo sería como solía ser. Pero no fue así. Un pequeño número regresó y no pudieron hacer nada, no pudieron establecer la nación, no puedo restablecer la monarquía, no pudieron reconstruir la ciudad, ni siquiera pudieron echar a andar el santuario.
Al mismo tiempo en el primer año de Darío un tercer acontecimiento monumental sucedió, Daniel se retiró, y él era uno de los presidentes del imperio. Él había sido un presidente a lo largo del periodo babilonio y ahora inclusive en el período medo persa mantuvo su lugar grupo de tremendo. Y en esta situación en particular llegó el tiempo para que él se retirara, él aproximadamente tenía 85 años de edad. Y entonces él dejó la presidencia. Según el capítulo 1, versículo 21, él únicamente estuvo en el gobierno está el primer año de Ciro. Dice usted, ¿por qué no regresó él? Digo, si los 42,000 regresaron y fue algo tan grande para él, ¿por qué no regresó él? Le voy a decir por qué creo que no regresó. Y no es porque como dicen los comentaristas, dicen que él no regresó porque era demasiado grande en edad. Yo no creo eso. Yo creo que él no regresó porque él estaba demasiado desanimado. En otras palabras, creo que él se vio a sí mismo como teniendo la responsabilidad de motivar a los judíos que quedaban a regresar. Entonces él no podía irse porque él no estaba satisfecho. Él tuvo una pasión por ver a su pueblo pecaminoso dejar Babilonia y regresar a su país. Seguramente él habría anhelado regresar, regresar a la tierra que él amaba, pero él era demasiado abnegado y él estaba demasiado cargado por su pueblo necesitado como para preocuparse por sus propios deseos.
Y entonces él hace lo que él siempre hace. ¿Qué es lo que siempre hace Daniel en medio de una crisis? Ora siempre. Y conforme el capítulo 10 abre eso es exactamente lo que lo encontramos haciendo otra vez. Él se queda para enfrentar con su pueblo y aquí él enfrenta el dilema de su indiferencia en su manera normal mediante la oración. Y de nuevo la visión que viene en el capítulo 11, la revelación que viene en el capítulo 11 es en respuesta divina a esta oración. Versículo 1, “En el año tercero de Ciro rey de Persia fue revelada palabra a Daniel, llamado Belsasar.” simplemente para que sepan que es el mismo Daniel. Ese es el nombre que los babilonios le dieron cuando él llegó por primera vez. Ese es un nombre babilonio conectado con sus dioses, sus deidades. Estaban tratando de lavarle el cerebro a Daniel. Y una de las maneras en las que trataron de hacer eso fue al darle un nombre de una de sus deidades babilonias. Y simplemente para que usted sepa que es el mismo Daniel, se nos vuelve a dar ese nombre babilonio. Aunque usted ahora está en el tercer año de Ciro en el Imperio Medo Persa, es el mismo Daniel. Y la palabra es la verdadera y el conflicto grande. Pero él comprendió la palabra y tuvo inteligencia en la visión.
Ahora, eso básicamente es un panorama de lo que va a suceder en los siguientes versículos. Daniel recibió una revelación, la revelación fue verdadera, él entendió muy bien la revelación. Eso es lo que eso nos está diciendo. Ahora, observe la afirmación ahí que la palabra era verdadera. Dice usted, ¿es eso para asumir que otras cosas en la Biblia no son verdaderas? Claro que no. Pero escuche, la naturaleza de esta revelación es tan sorprendente y tan asombrosa y humanamente tan increíble que la afirmación de que esto es verdadera es hecho para asegurarle al lector que no debe sorprenderse por la naturaleza impresionante de la profecía, realmente es verdad. Hacemos eso cuando tenemos una plática, queremos decirle a alguien algo que no van a creer decimos, “Ahora, quiero que sepas que esto es la verdad.” Y eso es esencialmente lo que tenemos aquí.
Observe la frase en el versículo 1, “Y el conflicto grande.” En Reina Valera 60. Y la razón por la que usted tiene aquí una discrepancia con otras versiones es que es una frase hebrea muy difícil con algunas palabras muy oscuras. Y la mejor manera de expresarlo, creo yo, es simplemente leerlo de esta manera, cuyo nombre era llamado Belsasar, y la palabra era verdadera e involucraba una gran guerra, involucra una gran guerra. Creo que eso encaja con el contexto, creo que encaja de la mejor manera con la frase hebrea que es usada aquí, y creo que es la esencia de lo que está siendo dicho, y creo que la han expresado bien en la nueva versión americana estándar.
Ahora, usted encuentre ahí la palabra para conflicto, la palabra batalla, eso está obviamente ahí. Y esa palabra es usada para hablar de un ejército, es usada para hablar del ejército de los ángeles, y algunas veces es usada para hablar de una batalla en sí. Entonces tiene usted ejércitos de hombres, ejércitos de ángeles y de batallas en sí, a los tres hace referencia esa misma palabra. Y creo que el contexto afirma el uso de batalla o conflicto, como usted verá conforme avanzamos a lo largo del décimo capítulo. Usted verá cómo el contexto apunta al uso de la palabra conflicto.
Entonces Daniel está diciendo, “Miren, esta revelación es verdad, involucra una gran batalla o conflicto.” Y como usted verá, es de hecho una gran guerra y conflicto, de hecho antes de que acabe con esta profecía usted va a ver guerra desde los demonios en el espacio a los hombres en la tierra y en todos lados en medio de estos dos puntos. Esta es una profecía acerca de conflicto, guerra, desde ángeles santos y demonios en el espacio hasta Rusia e Israel en la tierra. Desde el tiempo de Daniel a nuestro tiempo se extiende el conflicto.
Ahora, la visión previa había dejado a Daniel bastante turbado y confundido. Si usted va al final del capítulo 8, y Daniel, “Me desmayé y estuve enfermo por varios días. Después me levanté y continué con el negocio del rey estuve sorprendido por la visión pero nadie lo entendió.” Entonces la última visión en particular que él tuvo en el capítulo 8 lo dejó totalmente confundido.
Pero en este caso él dice, “La entendí y tuve entendimiento de la visión.” Él entendió el mensaje este caso espero que usted también. Y quiero añadir que usted y yo tenemos el beneficio del Espíritu Santo quien mora en nosotros para instruirnos en cuanto a sus verdades.
Ahora, vamos a ver varios puntos, vamos a movernos bastante rápido, entonces aférrese a su Biblia. Vamos a ver seis puntos conforme avanzamos a lo largo de este capítulo, llorando hacia el cielo, manifestación del cielo, dominio del cielo, mensajero del cielo. Todos estos elementos nos dicen que el cielo ha venido a la tierra. En primer lugar lloro hacia el cielo, lloro, en el sentido de lloro hacia el cielo, versículo 2, “En aquellos días yo Daniel – y esta es una frase que él usa cinco veces – yo Daniel – para que sepa usted que este verdaderamente es su testimonio – estuve afligido llorando por espacio de tres – literalmente dice en el hebreo 3 semanas de días para distinguirlo de las semanas de años en el capítulo 9 – por 3 semanas estuve llorando.” Ahora, ¿cuándo es esto? En el tercer año de Ciro. Pero sabemos más que eso, sabemos qué día fue. Observe el versículo 4, el día 24 del mes primero, el día 24 del mes primero sería el 24 del mes nisán.
Ahora, él comenzó, él estaba llorando en el día 24 de nisán. Y ese es el día en él que él recibió la visitación angélica, y él había estado llorando durante 3 semanas, 21 días, él comenzó entonces en el tercero de nisán, ¿verdad? 3 del 24 equivale a 21, es mucho más siempre que las 70 semanas, ¿verdad? Entonces él había estado llorando desde el tercero del nisán. Lo que es particularmente interesante acerca de eso es que la Pascua siempre cae en el 14 del nisán Entonces él está llorando a lo largo del tiempo de la Pascua y los 7 días de la fiesta de los panes sin levadura. Esa fue una temporada muy especial, una temporada de algo de celebración, una temporada de actividad. Pero a lo largo de esa temporada tan importante del calendario judío Daniel estaba inmerso en llorar, en ayunar, en orar hasta el final de la fiesta de los panes sin levadura, el 21 de nisán y 3 días después de eso.
Sin embargo, en todas estas 3 semanas el cielo está en silencio, el cielo es como bronce, no hay respuesta. Y Daniel no está acostumbrado a ese tipo de trato, porque allá atrás en el capítulo 9 él oro y el ángel vino, ¿y sabe usted lo que el ángel dijo? Él llegó antes de que él acabara de orar, ¿se acuerda de eso? En el mismo día y él dice, “Cuando comenzaste a prepararte para orar Dios envió la respuesta.” Entonces Daniel estaba acostumbrado a servicio relativamente rápido, ciertamente no 21 días sin respuesta alguna. Pero ese fue el caso. Versículo 3, “No comí manjar delicado.” Por cierto, esa frase pequeña significa pan de deleite o alimento de deleite. En otras palabras, él no comió lo delicado, las cosas realmente buenas, las cosas realmente especiales, lo elegante. Esa fue una forma de ayuno por cierto. El ayuno en la Biblia no siempre era comer nada, con mucha frecuencia era refrenarse de cosas delicadas y alimentos elegantes y simplemente comer lo necesario para mantenerse con vida, era refrenarse de los banquetes y los festivales y los tiempos de comida especial. Pero más allá de eso él no solo no comió manjar delicado, “Ni entró en mi boca carne ni vino.” Y eso es algo así como carne y papas, digo, ni siquiera comí lo rutinario, vino y carne; ni lo delicado ni las cosas normales, ni me ungí con ungüento. Dice usted, no sabía que usaban loción para después de rasurarse en esos días. Bueno, no la usaban, y no está hablando de eso; solían usar un aceite con fragancia en sus cuerpos y lo aplicaban a su piel por varias razones; una era proteger la piel de la fuerza del sol, otra era mantener la piel suave, y otra era añadir una fragancia al cuerpo porque no tenían todos los desodorantes y lo demás que tenemos en la actualidad. Entonces se ungían a sí mismos. Y se convirtió en un símbolo de gozo. Cuando usted salía y quería adornar una escena social, cuando usted quería estar entre la gente usted se colocaba ese aceite. Era una señal de interacción social. Era un símbolo y una señal de gozo. Proverbios 27:9 presenta eso claramente, también se nos dice nos dice en 2 Samuel 12 que durante tiempos de lloro el ungirse no se hacía, también no quería usted interacción social, usted no quería un símbolo de gozo manifiesto, usted estaba viviendo en un momento de tristeza.
Y entonces él no come nada y no se pone nada. Ahora, mantenga en mente que para un hombre de 85 años de edad un ayuno de 21 días es relativamente significativo. Ahora, estos actos en sí mismos – y quiero que usted entienda esto – no solicita el favor de Dios. Si usted no come durante 21 días eso no necesariamente va a hacer que Dios haga algo por usted que Él no haría de otra manera, no obstante si usted está tan enfocado en Dios y está tan cargado y su corazón es tan puro y está tan bien, su corazón que usted no come por 21 días Dios lo va a bendecir usted por su actitud de corazón, no por su abstinencia del alimento, esa es simplemente la manifestación de un corazón que está preocupado.
Ahora, ¿por qué estaba él haciendo esto? Digo, el hombre parece estar excediéndose, usted tiene el decreto de Ciro 2 años antes, 42,600 personas regresaron. Aquí está usted 2 años más tarde y durante 21 días usted no come y llora todo este tiempo, ¿cuál es el problema? El problema es simple, no regresaron, solo un pequeño remanente regresó y los que regresaron fueron un fracaso total. Como puede ver, Daniel no se dio cuenta de lo que usted y yo ahora sabemos, que los 70 años de desolación no comenzaron en el tiempo de la cautividad de Daniel porque Jerusalén no fue destruida sino hasta el 586 antes de Cristo, casi 20 años más tarde. Entonces los 70 años realmente no comenzaron sino hasta 20 años después. Entonces el decreto de Ciro únicamente fue uno preliminar.
Siempre me ha fascinado ver que hubieron tres deportaciones; 605 y después se unen el 590 algo y después se unen el 586. Y también hubieron cuatro decretos. De tal manera que Dios comenzó a enviarlos de regreso en partes, así como llegaron en partes. Pero la plenitud de los 70 años decretados para la desolación de Jerusalén no podía comenzar sino hasta que fue desolada en el586. Entonces Daniel realmente no entendió esto, sino que no era tiempo aún para que todo se completara y todo mundo regresará entonces. Pero bueno, él está orando y en su abnegación él anhela que su pueblo esté en su lugar. Entonces vemos lloro hacia el cielo. Ahora permítame decirle algo, ese tipo de actitud de corazón y ese tipo de espíritu obtiene una respuesta de Dios. Y eso es lo que encontramos en el segundo punto; manifestación del cielo, versículo 4, esto es increíble, manifestación del cielo, de pronto aquí viene el cielo, “Y el día 2 4 del mes primero – eso es nisán 24 – estaba yo a la orilla del gran Río Hidekel – y por cierto Hidekel es una forma antigua de la palabra diglia, el cual es su nombre moderno actual árabe para el Río Tigris, viene de idiglia el cual es su nombre antiguo usado por los babilonios e Hidekel simplemente significa el Tigris, hubieron dos grandes ríos, el Éufrates y el Tigris, y el Tigris estaba a unos más de 60 kilómetros al este y estaba allá por el Tigris, no nos dice por qué, no sabemos por qué, sabemos si él estaba ahí oficialmente o de manera extraoficial. Sabemos que él se había retirado de su presidencia. Él pudo haber estado ahí tratando de motivar a algunos de los judíos para que regresarán a la tierra. No sabemos lo que él estaba haciendo ahí, no obstante ahí estaba.
Versículo 5, “Y alce mis ojos y miré y he aquí – ese es un término de exclamación –un varón vestido de lino, y ceñidos sus lomos de oro de ufaz, su cuerpo era como de berilo, y su rostro parecía un relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos y sus pies como de color de bronce bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.” Ahora, eso es algo bastante aterrador que ver. Digo, usted ha estado orando y ayunando durante 3 semanas y ahí está en medio de la nada al lado del Río Tigris y de pronto una criatura como está se aparece en forma de hombre vestido de lino, ceñido de oro, su cuerpo era como el berilo, su rostro como un relámpago, sus ojos como llamas de fuego, sus pies y sus brazos como bronce pulido, y su voz como el océano. Esto amigos es un visitante celestial. Ha tomado 3 semanas pero él recibió una visita. Algunos sugieren que este es Gabriel, algunos sugieren que es Miguel y algunos sugieren que es algún otro ángel no nombrado del mismo rango. Pero la visión es mejor vista no como cualquier ángel en absoluto – ahora escucha esto – sino como Dios mismo. Y estoy convencido de que este no es ningún otro que Dios – escuche – en la forma del segundo miembro de la Trinidad preencarnado, no creado, el Señor Jesucristo. Esta es una aparición preencarnada de Cristo, y esto es lo que llamamos una cristofanía, una aparición preencarnada de Cristo.
Dice usted, bueno, ¿por qué hace es el paralelo de esto con Cristo? Observe Apocalipsis capítulo 1, Apocalipsis capítulo 1, versículo 12, Juan dice, “Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo y vuelto vi siete candeleros de oro y en medio de los siete candeleros a uno semejante al hijo del hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies y ceñido por el pecho con un cinto de oro, su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve, sus ojos como llama de fuego y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno, y su voz como estruendo de muchas aguas.” ¿Ve ahí usted un paralelo? Casi idéntico, excepto por el cabello. Un paralelo casi exacto. ¿Y quién es el que aparece a Juan en Apocalipsis 1? Dice, “Yo soy el Alfa y la Omega.” ¿Quién es ese? Cristo. Usted tiene una descripción casi idéntica aquí. Juan vio a Cristo en gloria post resurrección, Daniel vio a Cristo en gloria preencarnacion. Jesucristo no fue creado cuando Él nació, Él existió eternamente. Entonces vemos paralelos exactos en estas descripciones. Por cierto, no es raro que Cristo aparezca en esta forma en el Antiguo Testamento o en una forma semejante. Hay una frase usada en el Antiguo Testamento 50 veces diferentes, es la frase El Ángel de Jehová. ¿Ha leído usted esa frase? O El Ángel del Señor.
Y lo más comunes que El Ángel de Jehová se refiere a Jehová Dios en la segunda persona viniendo al tiempo y al espacio, una aparición preencarnada del Cristo no creado. Y usted puede leerlo a lo largo de Génesis, particularmente el capítulo 16, lo puedo ver en Éxodo capítulo 3, lo puedo ver en Josué capítulo 5, lo puedo ver en Jueces capítulo 6 y Jueces capítulo 13, puede verlo en Zacarías capítulo 1, en Zacarías capítulo 3. Y muchos, muchos otros lugares. La aparición de este Ángel del Señor, quien es mejor entendido en la mayoría de los casos como Jehová, la segunda persona de la Trinidad apareciendo en el tiempo y el espacio.
Y hay otro pensamiento interesante en esto, y es este; que cuando el Ángel del Señor aparece las cosas que él hace son paralelas, y estoy muy interesante, a las cosas que Cristo hace a favor de su iglesia. El Ángel del Señor en el Antiguo Testamento fue el protector definitivo de Israel y Cristo es el protector de su iglesia. El Ángel del Señor vino revelando la verdad. Él vino comisionando a Moisés, Él vino comisionando a Gedeón, Él vino comisionando a Sansón, Él vino a liberar a su pueblo, Él vino como dice el Salmo 34, protegiendo a su pueblo. El Ángel del Señor acampa alrededor de los que le temen y los libera. Él vino intercediendo por su pueblo, Él vino como un abogado defensor en Zacarías 3, Él vino con Abraham confirmando el pacto, Él vino con Agar ofreciendo consuelo. Todos estos son paralelos a lo que Cristo hace en su ministerio a la iglesia, y realmente creo que lo que usted tiene aquí es a Dios descendiendo a Daniel en la forma de Cristo preencarnado no creado.
Ahora, debido a que Cristo es el comandante en jefe de todo el ejército angélico invisible y debido a que Él tiene todo autoridad es apropiado que Él aparezca en este lugar en particular debido a la naturaleza de esta profecía, esta profecía va a mostrarle el conflicto angelical y la batalla que se extiende desde el tiempo de Daniel hasta la batalla angelical final de Apocalipsis 2, en donde Miguel y los ángeles santos derrotan a los demonios y sus fuerzas. Pero todo este periodo entre ahora y la tribulación, entre Daniel y la tribulación es un período de batalla angelical. También se ha llevado a cabo desde la caída desde los ángeles antes de la creación del hombre.
Entonces en un tiempo en el que Daniel va a ver la batalla angelical tan tremenda que se ve aquí, es apropiado que él tenga una visión del comandante en jefe, y yo creo que eso es exactamente lo que Dios le dio. Observe conmigo esta visión por un momento. En primer lugar, Él estaba vestido de lino, el lino fino blanco era el atuendo de los sacerdotes, con frecuencia también en el Antiguo Testamento como en Ezequiel 9 y 10, los visitantes celestiales aparecen en lino blanco fino. En Marcos 16 los ángeles aparecen en la tumba de Cristo vestidos en lino fino blanco. Una y otra vez usted ve esto asociado con el cielo, asociado con aquellos que representan a Dios. Y el lino fino blanco es un símbolo de la santidad de Dios, santidad, el primer y más importante atributo de Dios. En segundo lugar, dice que es ceñidos sus lomos de oro de ufaz, no tenemos idea de lo que es ufaz, no sabemos en dónde está o lo que es. Pero la idea es que hay un cinto que está cubierto de oro fino. Realmente creo que eso habla de la soberanía de Dios, de su soberanía, oro hermoso, brillante, refulgente, el metal más rico, el más puro, la soberanía de Dios.
Después tiene usted el berilo, una joya refulgente transparente, que algunas veces puede ser producida cristalita, en algunos casos inclusive la han traducido topacio, no estoy muy seguro exactamente de lo que es el topacio, de dónde viene. Pero la idea parece ser una joya refulgente transparente que refleja la gloria de Dios. Entonces usted tiene la santidad de Dios, la soberanía de Dios, la gloria de Dios, oro es el oro de un soberano, un rey; y esta joya que es un diamante transparente, brillante, refulgente habla de gloria. Y después dice que su rostro parecía un relámpago, y creo que esto es poder y omnipotencia. Apocalipsis dice que tiene el rostro como el sol, la luz brillante que es manifiesta en su rostro habla de su omnipotencia y su poder. Y después dice que sus ojos son como antorchas de fuego escudriñado, descubriendo la realidad. Esto es conocimiento penetrante omnisciente, Él conoce todo. Sus pies como de bronce pulido, y esto es para pisar en juicio, juicio es atributo de Dios, la ira de Dios. Y cuando Él habla Su voz como el rugido de muchas aguas.
¿Qué vio Daniel? Él vio a Dios. Él vio la santidad de Dios representando la soberanía de Dios, la gloria de Dios, el poder de Dios, la omnisciencia de Dios, el juicio de Dios. Ahora, por cierto, ¿Recuerda usted que esta es la tercera cristofanía que él ha tenido? Esta es la tercera vez que el segundo miembro de la Trinidad le ha aparecido. ¿Recuerda usted la primera vez en dónde fue? En el horno de fuego. Recuerdo usted la segunda vez en el capítulo 7 cuando él tuvo una visión del trono, y en el trono estaba el anciano de días y vino uno como hijo del hombre, tres veces, no es diferente del Apóstol Pablo quién vivió después de Cristo y Dios también le dio tres visiones del Cristo glorificado. Ahora, esta visión debió haber sido la fuente de esperanza dulce para el profeta ya mayor, su corazón había estado tan cargado. Y de pronto Dios llegó en la escena para darle una visita de primera mano.
Ahora, eso me lleva a un tercer punto, lo que llamó dominio del cielo. Cada vez que el cielo invade la tierra de esta manera somos dominados por eso invasión, estaremos sorprendidos de manera excesiva. Y eso es lo que le pasó a Daniel, versículo 7, “Y solo yo Daniel vi aquella visión.” No fue realmente una visión en el sentido de un sueño, realmente estuvo ahí, fue real, un hombre vestido de lino, no está en un sueño o visión, el hombre estuvo ahí. Descubrimos eso por la manera en la que él interactúa más adelante con los otros visitantes. Y él dice, “Y no la vieron los hombres que estaban conmigo – observe esto – sino que se apoderó de ellos un gran temor y oyeron y se escondieron.” No sé quiénes son estas personas, pero lo que me sorprende, no nos dice si fueron judíos incrédulos o unos páganos, no sé quiénes fueron. Pero lo que me sorprende es que ni siquiera vieron la visión pero supieron que algo estaba pasando y salieron de ahí y comenzaron a temblar, comenzaron a sacudirse y huyeron a esconderse, de qué, de algo que no podían ver.
Pero créame, en donde usted tiene la presencia de Dios está el poder de Su presencia, y es más de lo que los pecadores pueden soportar, es una reacción muy comprensible frente a la santidad majestuosa de Dios. Usted recuerda inclusive un hombre bueno como Job cuando vio a Dios dijo, “De oídas te había oído, pero ahora mis ojos te ven y me aborrezco en polvo y cenizas.” ¿Se acuerda usted Isaías quien fue un hombre bueno y piadoso? Pero cuando vio a Dios él dijo, “Soy inmundo, tengo labios inmundos y vivo en medio de un pueblo de labios inmundos.” Pienso en Pedro cuando él vio el poder de Jesús desplegado y él dijo, “Apártate de mí, oh Señor, que soy pecador.” Él quería que Jesús se fuera. Usted lo leyó en Apocalipsis capítulo 6, “Cuando Dios se manifiesta en gloria gritan y claman porque las rocas y las montañas caigan sobre ellos para esconderlos de Su rostro.” Como puede ver, cuando lo santo confronta a lo impío, a lo inmundo, es una experiencia absolutamente devastadora, aunque no sabían qué estaba pasando, cuando la santidad absoluta vino a la escena quedaron aterrados.
Y Daniel quedó solo y él entró en un trauma severo, ni siquiera podían enfrentar lo que él podía enfrentar y él no podía enfrentar mucho de la presencia de Dios. Versículo 8, “quedé pues yo solo y vi esta gran visión y no quedó fuerza en mí, antes mi fuerza se cambió en desfallecimiento y no tuve vigor alguno.” Él dice, “Me quedé sin fuerzas.” Mi fuerza significa mi apariencia, su apariencia saludable. Su rostro se convirtió una palidez como de muerte, su rostro se veía grotesco, el pánico se apoderó de él, pánico absoluto. Él tenía tanto miedo que su fuerza fue quitada en la presencia de Dios. “Me quedé sin fuerza.” Como usted sabe, eso es exactamente lo que le pasó a Juan el Apóstol en Apocalipsis capítulo 1. Cuando él vio la visión él dijo, “Y cuando lo vi caí a sus pies – cómo qué – muerto.” Estar de pie en la presencia del Dios vivo es estar en una posición de pánico absoluto porque de pronto usted queda exhibido, abrumado con su pecaminosidad. Versículo 9, “Pero oí el sonido de sus palabras como el rugir del mar.” Estoy seguro que lo oyó diciendo algo, “Y al oír el sonido de sus palabras caí sobre mi rostro en un profundo sueño con mi rostro en tierra.” Él se desmayó, él perdió la conciencia de manera total, la expresión en el hebreo es, “Y mi rostro se quedó hacia el suelo.” Este es un profeta de 85 años de edad el suelo con la boca llena de polvo, su nariz contra el suelo, no tiene fuerza, sus amigos se han ido, él oye el rugido contenido de la voz del Hijo de Dios. Él estaba sacudido, él era como un hombre muerto, él había visto la gloria de Dios y el cielo lo había dominado, simplemente en eso.
Ahora, yo creo que esta fue la última vez que él vio al Cristo glorioso no creado, y él desapareció, y después Dios trajo algunos ángeles que comenzaron a ministrar a Daniel. Por cierto, no es extraño, ¿verdad? Dios con frecuencia viaja con algunos ángeles, lea Génesis 18, así vino Abraham. Entonces del lloro hacia el cielo vemos la manifestación del cielo, el dominio del cielo. En cuarto lugar el mensajero del cielo. Ahora, de pronto aquí viene un mensajero, “Y he aquí, una mano me tocó.” Como puede ver esta no es una visión, realmente está ahí, “Una mano me tocó – y los ángeles pueden adoptar la forma del hombre, tienen esa prerrogativa – e hizo que me pusiese sobre mis rodillas y sobre las palmas de mis manos.” Literalmente el hebreo dice, “El ángel me sacudió para que estuviera en mis rodillas y mis manos” O podrá traducirlo, “El ángel me puso en mis rodillas y mis manos temblando.” El ángel ahora desciende y toca a Daniel y Daniel regresa de su estado de muerte a un punto de conciencia y él puede levantarse sobre sus manos y rodillas. Y él está ahí en una condición estable temblando, tambaleándose, tratando de recuperar la fortaleza para ponerse de pie.
¿Sabe una cosa? Conforme comencé a pensar en esto comencé a ver mi propia vida. Tengo unas sombras así de la presencia de Dios, entro y salgo de Su presencia sin pensar en Su Majestad. Vengo adorarlo y cuando debería estar teniendo pensamientos tan abrumadores que literalmente me quitan la fuerza soy indiferente pensando en el mundo o en algún otro asunto que no tiene nada que ver con Él. Entonces este profeta de Dios de 85 años de edad debilitado por 21 días sin comer nada, con una boca llena de polvo se levanta sobre sus manos y rodillas y está temblando, versículo 11, “Y me dijo, Daniel varón muy amado.” Me encanta eso.
¿Sabe una cosa? Dios no se aparece de manera personal a todo mundo, este fue un hombre especial. Hay hombres así en la Biblia. David es llamado un hombre según el corazón de Dios. Abraham es llamado amigo de Dios. Juan fue llamado el discípulo a quién Jesús amaba. María dice halló favor con Dios. Hay esas personas que por su deleite especial en Dios y por su obediencia constante en un sentido muy real se vuelven muy amados. El ángel le dice, “Eres muy amado.” Creo que le dijo eso simplemente para quitarle el temor, “Esto va a ser algo bueno Daniel, no algo malo, no necesitas temer el juicio, eres muy amado.” Y le da dos órdenes, “Está atento a las palabras que te hablaré y ponte en pie.” En otras palabras, ponte de pie Daniel para que entiendas el mensaje claramente queremos que entiendas. Ahora, ponte de pie, pon atención, que tu mente esté alerta, entiende este mensaje. Mientras hablaba esto conmigo me puse en pie temblando. Daniel se levanta y él ahora está tambaleándose por todos lados tratando de ponerse de pie, él ha visto a Dios como puede ver en la gloria del Cristo no creado.
Ahora viene el mensaje del ángel. Primero él tiene que aclarar un detalle. Punto cinco, confusión en el cielo. Esto es fascinante. “Entonces me dijo, Daniel, no temas – oh eso habría quitado la presión, ¿verdad? – no temas, no tienes nada que temer porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y humillarte en la presencia de tu Dios – y él quiere decir con eso ayunar – te disciplinaste en el ayuno, y cuando quisiste realmente entender por qué el pueblo no estaba regresando y cuál era el plan y ayunaste para entender y oraste a Dios. Quiero que sepas Daniel que desde el primer día fueron oídas tus palabras y a causa de tus palabras yo he venido. Daniel, no pienses que Dios no está interesado, no pienses que 21 días han pasado, desde el primer día fuiste oído.” Bueno, ¿en dónde has estado por 3 semanas? ¿Qué tan lejos está de allá arriba aquí abajo? Viniste a Babilonia y no me pudiste encontrar, ¿dónde has estado? La última vez viniste el mismo día antes de que terminara con la oración. Observe el versículo 13, “Más el príncipe del reino de Persia se me opuso durante 21 días.” ¿Qué? Un ángel santo de la presencia de Dios se atoró en el espacio por culpa de quién, el príncipe del reino de Persia, y tú fuiste detenido por esa criatura. Sí, pero aquí Miguel, Miguel es el súper ángel, el ángel héroe, el ángel campeón, “Uno de los principales príncipes vino para ayudarme y quedé allí con los reyes de Persia.”
Ahora, escuchen, después de una palabra de consolación en el versículo 12 diciendo tú oración fue oída, hay una palabra de explicación acerca de cierta confusión que se estaba llevando a cabo en el cielo, ¿qué es esto? Observe el versículo 13, el príncipe del reino de Persia. El reinó gobernante de esa época fue Persia, Persia tuvo un príncipe. Escuche, pero ese príncipe no fue un hombre, ese príncipe fue un ser demoníaco, su trabajo consistía en controlar y ordenar de tal manera los asuntos de Persia como para operar en contra del pueblo los planes de Dios.
Ahora, observe esto, este es un principio increíble, este príncipe tuvo una relación muy cercana a Persia. Él debió haber sido más que mortal, de lo contrario no habría podido resistir la venida de un ángel santo, o no habría podido tener una batalla con Miguel. Él debió haber sido malo porque estaba tratando de detener a Dios de cumplir Su plan. Y él debió haber deseado que no hubiera futuro para Israel en la historia redentora, de lo contrario no habría tratado de estorbar el plan. Y además el versículo 20 indica que él tuvo una relación continúa con el reino de Persia, porque el ángel dice, “Cuando termine contigo Daniel, tengo que regresar a pelear más con este.”
Ahora, escuche esto, Satanás tiene una organización increíblemente inteligente, él ha establecido una red de demonios que están detrás de todas las actividades de la historia humana, se le asignó un demonio a Persia. Versículo 20 dice que hay un demonio que se le va a asignar a Grecia. La Biblia dice que todos los dioses de las naciones son demonios. Y yo creo sin duda alguna que a lo largo de toda la historia humana la red de demonios de Satanás han estado tras bambalinas esforzándose por hacer todo lo que pueden hacer para hacer que fracase el plan de Dios. Su tarea, la tarea de este príncipe de Persia era estorbar la voluntad y la operación de Dios con respecto a Persia, hacer todo lo que podía para contener el plan de Dios. Y cuando Persia se acabó, y cuando Grecia se convirtió en el tercer gran imperio mundial, según el versículo 20, otro demonio sería asignado para que fuera la potencia en Grecia y él tendría bajo él a una multitud de demonios para cumplir con sus instrucciones. Los sistemas humanos de este mundo son demoníacos. Esa es la razón por la que Pablo dice, “No tenemos lucha contra sangre y carne.” Hay fuerzas demoníacas apegadas a los Estados Unidos de Norteamérica para derribarnos y destruir el plan de Dios. Y estoy seguro que han habido ángeles santos en el pasado que nos han estado defendiendo, no sé si nos están todavía defendiendo o no, pero es un vistazo raro tras bambalinas en la historia mundial.
Y entonces Dios tuvo que enviar a Miguel, quien es el súper ángel, él es mencionado tres veces en Daniel, dos veces en el Nuevo Testamento, cinco veces en toda la Biblia. Él es llamado el arcángel, lo cual significa el primer ángel, su nombre significa uno quien es de Dios. Y por cierto, en Apocalipsis 12, si usted quiere leer acerca de la batalla más maravillosa de todas, Miguel y su ejército en Apocalipsis 12, en la gran tribulación de una vez por todas destruyen a todas las fuerzas demoníacas y ganan la batalla final. Pero observe lo que dice en el versículo 13, inclusive después de la lucha él dice, “Y quedé allí con los reyes de Persia.” Él mantuvo su lugar de influencia dominante. En otras palabras, este ángel venció al príncipe y mantuvo una buena influencia en Persia, el demonio perdió. Entonces él permaneció en su lugar de influencia para Dios con los reyes de Persia.
Y eso nos dice otra cosa, aparentemente Dios ha asignado a ángeles santos a naciones para cumplir los propósitos de él, y esta batalla se lleva a cabo todo el tiempo. Ahora, piense en eso en términos de Estados Unidos. Me pregunto lo que realmente está pasando en este momento. Entonces vemos el lloro, la manifestación, el dominio, el mensajero, la confusión y finalmente el poder del cielo. Voy a explicar esto rápidamente. El ángel habiendo enfrentado eso dice, escucha, “He venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu pueblo en los postreros días.” Porque la visión es para que esos días. Te voy a dar una visión no solo para ahora, no solo para los 70 años. Te voy a dar una visión que va a extenderse por muchos días.
Y él se refirió a eso de manera clara hasta el final de la tribulación, esta visión es a dónde llega, “Te voy a dar una visión que te va a decir lo que le va a suceder a tu pueblo en los últimos días, en los postreros días.” Desde Daniel hasta el anticristo y el asunto aquí es tu pueblo, no los gentiles, sino Israel. Usted espere para ver lo que sucede en el capítulo 11 cuando él explique la visión. Bueno, aquí está Daniel de pie, ahí simplemente tambaleándose y después de que él recibe esa información, versículo 15, “Mientras me decía estas palabras estaba yo con los ojos puestos en tierra y enmudecido.” Y algunos comentaristas piensan que en hebreo significa que él se volvió a caer, él volvió a golpear el polvo. Él nunca antes en su vida había oído algo como esto. Él nunca sabía nada acerca de batalla espiritual. Él no sabía nada acerca de guerra angelical, no como esto. Y él ha perdido sus palabras y se vuelve a caer otra vez. Él está inundado con un estado renovado de debilidad y queda postrado en el suelo, su boca está cerrada, él ni siquiera puede hablar, versículo 16, y aquí viene otro, “Pero he aquí uno con semejanza de hijo de hombre, otro apareció en forma humana, tocó mis labios.” Usted no puede tener un profeta que no puede hablar, ¿verdad? Lo hace muy difícil. Entonces él tocó sus labios. “Entonces abrí mi boca y hablé y dije el que estaba delante de mí, Señor mío, con la visión me han sobrevenido dolores y no me queda fuerza.” El ángel toca sus labios y le da el poder para hablar y él dice doni, no donai, donai es deidad, doni significa respeto, lo respeto a usted Señor, él dice mis dolores, la palabra tristeza significa mis torceduras o mis torceduras o mis temblores están sobre mí. En otras palabras, soy un desastre, no tengo fuerza alguna. Después versículo 17 dice, “Cómo pues podrá el siervo de mi Señor hablar con mi Señor, cómo es que me puedes dar alguna revelación, soy un desastre porque al instante me faltó la fuerza y no me quedo aliento.”
Dice usted, esto es realmente duro para un hombre de 85 años de edad. Versículo 18, “Y aquel que tenía semejanza de hombre me tocó otra vez y me fortaleció.” Ahora, eso es un milagro, de pronto estos ángeles tienen el poder para fortalecer un cuerpo. “Y me dijo muy amado, no temas, la paz sea contigo. Esfuérzate y aliéntate. Y mientras él me hablaba recobré las fuerzas y dije hable mi Señor porque me has fortalecido.” Él se recuperó. Daniel recibió fortaleza por parte de ese ángel. Eso para mí es una escena increíble, imaginar lo que sería estar de pie ante el Dios viviente. Vimos un poco de eso la semana pasada, ¿no es cierto? Vimos cómo cuando lo santo entra a la presencia de lo impío, lo impío quiere encontrar un agujero en donde esconderse, es devastado. Y ahí está Daniel. No sé si un mejor hombre vivió en su día que ese hombre, pero cuando fue confrontado con el Dios viviente él fue totalmente devastado. No me importa quién es usted, no importa qué tan bueno cree usted que es. Cuando usted esté algún día cara a cara con el Dios viviente, a menos de que usted sea protegido por la sangre de Jesucristo mediante la fe en Él usted será devastado, infinitamente más allá de esto, por Su presencia misma.
Bueno, él dijo, “Me siento fuerte ahora, estoy listo para oír el mensaje.” ¿Y qué mensaje sería para toda esta actividad? Después hay una posdata en el versículo 20, “Él me dijo, ¿sabes por qué he venido a tú? ¿Sabes por qué estoy aquí?” Esa es una especie de pregunta retórica. La respuesta de Daniel sería, “Bueno, me imagino que no.” Bueno lo que el ángel está implicando es esto, “Daniel, tú vas a recibir mucho más de lo que jamás pediste amigo, pasaste 21 días diciendo Señor qué le va a pasar a mi pueblo, ¿van a regresar? Y ayunaste y el nivel de tu deseo era conocer este retrato en este momento. Quiero que sepas que vas a recibir una visitación del cielo que va a expandir tu entendimiento de manera clara más allá de este periodo hasta el final de la historia.” Él oró por el pueblo, por su regreso y su avivamiento, pero Dios no solo le dio hechos, iban más allá de su época. Él descubrió que los demonios y los ángeles están llevando a cabo una batalla en el espacio. Él descubrió acerca de batallas sobrenaturales. Él descubrió lo que era estar en la presencia del Cristo no creado. Él descubrió acerca del poder supremo del ángel santo especial Miguel. Él había conocido al comandante en jefe de las fuerzas. Y ahora cuando usted regresa a eso en el versículo 1 en cierta manera tiene sentido en donde dice, “En el año tercero de Ciro rey de Persia fue revelada palabra a Daniel llamado Belsasar, y la palabra era verdadera y el conflicto grande.” Escuche, algunas veces, usted sabe, pienso en esto con tanta frecuencia, nos enredamos con cosas triviales. Hombre, usted sabe, le digo, algunas veces se vuelve tan desagradable. Nos preocupamos con cosas triviales mientras que Dios está tratando de enseñar verdades eternas monumentales.
¿Sabe una cosa? Algunos cristianos nunca realmente estudian su Biblia, están metiéndose con el cristianismo a nivel superficial de iglesia y realmente nunca entran a las profundidades. El ángel dijo, “Vas a recibir mucho más de lo que pediste Daniel.” Por cierto, versículo 20, “Pues ahora tengo que volver para pelear contra el príncipe de Persia. Y al terminar con él, el príncipe de Grecia vendrá.” En otras palabras, “Tengo que darte este mensaje rápidamente porque tengo que regresar a la batalla. Estoy peleando contra los persas a favor de Israel. Él está peleando contra Israel y tengo que asegurarme de que esté ahí para cumplir con mi trabajo.”
¿Es esa una lección? Dios de hecho cumple su voluntad a través del conflicto angelical, increíble. Y este ángel dice, “Tengo que apresurarme para darte mi mensaje para que pueda regresar a la guerra. Y cuando termine con este asunto persa, Grecia va a venir y voy a tener que pelear también con ese. Postdata, pero yo te declararé lo que está escrito en el libro de la verdad. Te voy a dar la revelación antes de que me vaya y es verdad. Y ninguno me ayuda contra ellos sino Miguel, vuestro príncipe.” Oh que palabra de consuelo. Y él dice, “Te voy a decir algo, entre yo y Miguel podemos enfrentarlo, lo único que necesito es a Miguel. Eso es todo. Estoy allá arriba luchando, si me meto en problemas, si me atoro por 20 días. Miguel, Miguel dispara y eso lo cierra.” Y después lo llama Miguel vuestro príncipe, el príncipe del pueblo de Dios. Oh, él debe ser una criatura increíble.
¿Cree usted que hay algo en este capítulo que vale la pena predicar? Eso espero. ¿Sabe lo que yo veo este capítulo? Permítame decirle esto rápidamente en unos 30 segundos, escuche, veo verdades acerca de Dios, Su santidad, Su Majestad y Su gloria. Veo verdades acerca de la función de Jesucristo. Veo verdades acerca de los ángeles y demonios y su batalla. Veo verdades acerca del corazón y vida de un hombre sin paralelos, Daniel, un hombre de oración. Veo verdades acerca de lo que es la médula de la oración intercesora; un corazón quebrantado, un corazón anegado. Veo verdades acerca de la primera respuesta a cualquier crisis, de nuevo, la cual es la oración. Veo verdades acerca de la condescensión de Dios, que Dios venga al hombre me deja sin palabras. ¿Por qué se molesta Él? Veo verdades acerca de la gracia de Dios, que puede tomar a un hombre tembloroso, débil, frágil, tocar su boca y hacerlo hablar para Dios.
Y le voy a decir una cosa, esta me confronta. Hombre, estoy tan contento porque Dios puede tomar un instrumento frágil, tocar su boca y dejarlo hablar. Veo verdades de mi propia ineptitud y su propia ineptitud, la de usted, y cómo Dios puede venir a nuestro punto de mayor debilidad mientras que estamos postrados en el suelo como hombres muertos con una boca llena de polvo, y puede levantarnos, ponernos de pie y fortalecernos para ser usados para Su gloria es un mensaje de condescensión, es un mensaje del cielo que viene a la tierra e infunde poder a los hombres para que puedan hablar por Dios. Que cosa tan gloriosa. Eso es solo la introducción. Dentro de 2 semanas a partir de esta noche llegaremos a la visión. Oremos.
Gracias Padre por nuestro tiempo en esta noche. Te damos gracias por este gran capítulo. Tengo un amor tan profundo en mi corazón por Daniel, lo admiro tanto, él es tanto el hombre que desearía que yo fuera, en tantas maneras él ejemplifica los principios que todos nosotros debemos vivir. Ayúdanos Padre no solo a ver la verdad bíblica, sino a ver al hombre y el patrón y ejemplo que él establece, y te daremos la gloria en el nombre de Jesús. Amén.
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