Al regresar al libro de Efesios, eso es un deleite para mí. Me siento más cómodo cuando estoy exponiendo un libro del Nuevo Testamento. Y creo que la última vez que cubrí Efesios fue hace mucho tiempo, y era el momento adecuado verlo otra vez, ya que dudo que muchos de ustedes estuvieron aquí. No debe usted vivir su vida cristiana sin la oportunidad de estudiar este increíble libro.
Quiero que el tema para esta semana sea, y ciertamente la próxima semana cuando volvamos a ver el mismo pasaje, “Cristo es todo. Cristo es todo ". Me sorprende cómo la iglesia, las iglesias, los líderes de la iglesia, pueden perder totalmente su enfoque en Cristo y desviarse hacia todo tipo de otros temas. Es, es muy triste. Cristo es todo. Voy a tratar de enseñarles eso hoy, y nuestro enfoque siempre debe estar en Él en nuestra vida personal y también en nuestra vida de la iglesia.
A veces necesito salir del entorno actual en el que me encuentro, incluso del entorno teológico actual o del entorno eclesiológico en el que me encuentro; y para hacer eso, por lo general trato de encontrar algunos libros antiguos y retroceder. Y vi un libro que se titula La reforma de la Iglesia. Incluye artículos de predicadores que vivieron en el siglo XVII. Así que se remonta a cientos de años atrás, y aborda el tema incluso entonces, incluso en esa época que estaba tan cerca de la Reforma — a uno ciento cincuenta años después de la Reforma había una necesidad de llamar a la iglesia a otra reforma.
Y en esa antología de esos escritores del siglo XVII, Ian Murray escribió un prólogo, mi querido amigo Ian Murray. Escribió esto en ese mismo año, 1964, y escuche lo que él dijo; y cito: "En un momento en el que la fe cristiana tiene tan poca influencia en la nación, la iglesia misma debería estar comprometida con cuestiones que afectan su propia vida en lugar de la vida de las masas populares".
Una visión tan simple pero profunda. Cuando la iglesia comienza a enfocarse en las masas populares y lo que la gente quiere, pierde su influencia. Casi se oye contradictorio. Los “expertos” de la iglesia le dirían que, si la iglesia quiere alcanzar al mundo, tenemos que descubrir qué quiere el mundo, cuando es todo lo contrario, la verdad. La fe cristiana siempre, siempre perderá su influencia cuando intenta adaptarse al mundo. Usted obtiene los resultados opuestos a los que esperaba.
En otra declaración, "Se ha vuelto costumbre que actuemos como si el evangelio pudiera progresar en la tierra independientemente de la condición de la iglesia". Gran declaración. Pensamos que la naturaleza de la iglesia aparentemente tiene un papel insignificante en alcanzar al mundo con el evangelio. De hecho, hay tantos, en estos días, tan ocupados tratando de descubrir qué quiere el mundo que es una noción muy popular que lo peor que puede hacer una iglesia, que quiere alcanzar al mundo, es actuar como una iglesia. Esa es la mentira del diablo.
Para que la iglesia alcance al mundo, debe negarse a ser como el mundo. Debe negarse a definirse a sí misma, por lo que el mundo quiere, lo que quieren los incrédulos, por lo que desean los inconversos. La iglesia tiene una obligación, y esa es ser lo que el Señor de la iglesia manda, no enfocada en la cultura sino enfocada en Cristo, no enfocada en asuntos sociales pasajeros, los deseos de los hijos del diablo, sino únicamente en la voluntad del Señor. Sólo cuando las iglesias son lo que Cristo quiere que sean, son útiles en el cumplimiento de la Gran Comisión.
Claramente, las iglesias tienen poca influencia en el mundo porque están tratando de darle al mundo lo que quiere, en lugar de obedecer al Señor, quien es la cabeza de la iglesia. No hay ningún texto en todo el Nuevo Testamento que ordene a la iglesia darles a los pecadores perdidos lo que ellos quieren; por otro lado, la iglesia debe obedecer al Señor Jesucristo, para confrontar a la cultura como la iglesia. No hay nada en el Nuevo Testamento que llame a la iglesia a cambiar las estructuras sociales, a participar en esfuerzos políticos, esfuerzos económicos.
La iglesia que alcanza eficazmente a los perdidos es la iglesia que se dedica incansablemente a ser lo que el Señor de la iglesia ordena que sea Su iglesia. Si una iglesia tiene poca influencia en el mundo, no pregunte qué quiere el mundo, pregunte qué requiere el Señor. Sea la iglesia. Siempre ha sido nuestra pasión aquí obedecer, y honrar y exaltar al Señor Jesucristo. No tenemos interés en lo que los hijos del diablo quieren que sea una iglesia; eso es irrelevante. Y, además, más allá de ser irrelevante, invita al diablo a entrar. En la Reforma hubo un principio que se expresó llamado el principio formal. El principio formal era simplemente lo que los reformadores identificaron como la verdad: que la Palabra de Dios es la única autoridad en el reino de Dios y, por lo tanto, en la iglesia.
Entonces la iglesia debe ser lo que la Palabra de Dios le dice que sea. Ese es el principio formal. Tenemos una sola revelación divina para la vida de la iglesia, y esa es la Sagrada Escritura. Y cuando usted entra en las epístolas del Nuevo Testamento como Efesios y el resto de ellas, usted se da cuenta de que están diseñadas para asegurarse de que todas las generaciones posteriores de cristianos e iglesias comprendan la voluntad del Señor para su vida y conducta.
Y eso es verdad de las epístolas en general, pero particularmente verdad de Efesios. Al principio del ministerio aquí, yo quería profundizar en Efesios porque es tan absolutamente definitivo en términos de la vida de la iglesia. Aquí está el libro de instrucciones del cielo para que la iglesia sea la iglesia. No hay una palabra aquí sobre lo que quiere el mundo. No hay nada sobre cómo involucrarse política, social y culturalmente. Todo tiene que ver con cómo seguir al Señor, quien es la cabeza de la iglesia, cómo estar consumido con Cristo. Esa es la razón por la que la epístola comienza esencialmente en el versículo 3, "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo".
Todo está en Cristo, todo. Todo trata de nuestra relación con Cristo. Todo tiene que ver con conocerlo, amarlo, adorarlo, declararlo y llegar a ser como Él. Eso es lo que necesita ser la iglesia. Cuanto más se parece al mundo, más pierde su influencia. Cuanto más se mete con el mundo, se vuelve más divisiva, cuánto más quejosa se vuelve, más fracturada se vuelve, su debilidad se expone más. Es un peligro mortal para la iglesia, cualquier iglesia en cualquier lugar, ser algo diferente a lo que el Señor de la iglesia ha diseñado que sea. Y tenemos toda la información en la revelación del Nuevo Testamento.
Entonces, conforme vemos el libro de Efesios, vamos a ver que en los primeros tres capítulos el énfasis está en la doctrina, eso es lo que creemos. Y los últimos tres capítulos son la sección práctica: cómo nos comportamos. Y cómo nos comportamos depende de lo que creemos. Así que vamos a ver, en primer lugar, lo que creemos y cómo eso afecta o impacta como nos conducimos.
Pero vamos a saltar por encima del texto de Efesios en una oración, allí mismo en el capítulo 1. Esta oración, usted casi se siente como si fuera una especie de interrupción en el flujo de la revelación de Pablo para la iglesia. Es casi como si él no pudiera dar otro paso más a menos que él ofrezca una oración por la iglesia. Él está escribiendo a la iglesia en Éfeso; han pasado cuatro años desde que estuvo allí. No solo a la iglesia en Éfeso, sino que Éfeso era una ciudad importante en Asia Menor, y habían otras iglesias enumeradas en Apocalipsis 2 y 3; ellas también habrían recibido esta carta. Él comienza con ese asombroso conjunto de bendiciones, bendiciones espirituales en Cristo; y luego, antes de comenzar a entrar en más detalles sobre la iglesia y lo que cree y cómo se comporta, él eleva una oración a partir del versículo 15. Así que véalo conmigo. Esta es una oración por la iglesia.
“Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.”
Eso simplemente está lleno de verdad centrada en Cristo. Y la oración de Pablo es que la iglesia se concentre en comprender plenamente lo que es de ellos en Cristo. Todo pastor fiel debe estar guiando a su iglesia hacia el conocimiento profundo de Cristo. Todo pastor fiel debe vivir en la expresión constante de un deseo de ver a la iglesia llena de la sabiduría y el conocimiento que viene con una profunda revelación de Cristo. Esta es la iglesia siendo la iglesia, estando centrada en Cristo. Ciertamente esta es mi oración por Grace.
Así que veamos esa oración, al menos a modo de introducción esta mañana. Versículo 15, "Por esta causa", nos detendremos allí. ¿Qué causa? ¿Qué impulsa esta intercesión? ¿Qué impulsa esta gratitud y esta solicitud por un espíritu de sabiduría y revelación en el conocimiento de Cristo? "Por esta causa." ¿Cuál es la causa? La causa es debido a las bendiciones incomparables de Cristo enumeradas desde los versículos 3 al 14. Ahora, si no estaba aquí cuando cubrimos eso, puede descargar los mensajes.
Está más allá de la comprensión cuán ricas son las bendiciones y las promesas en Cristo que se han concedido a todo creyente verdadero, en base a que, como dice el versículo 3, hemos sido “bendecidos. . . con toda bendición espiritual en los lugares celestiales”. Sobre la base de que "nos escogió en él antes de la fundación del mundo". Sobre la base de que Él nos escogió “para que” un día eternamente “fuésemos santos y sin mancha delante de Él” porque “en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos”; porque, en el versículo 7, "tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados"; porque “dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo,” versículo 10, de “reunir todas las cosas en Cristo, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra”.
Es decir, incluso nos ha dado el final de la historia; de que todo se resuelve en Cristo porque, en el versículo 11, “tuvimos herencia", a la cual fuimos "predestinados conforme a Su propósito divino", porque "habiendo creído,” versículo 13,“ fuimos sellados. . . con el Espíritu Santo de la promesa ". Y nada podrá jamás alterar ese cumplimiento futuro, debido, debido — debido a todas las bendiciones espirituales en los lugares celestiales. "Por esta causa", estoy orando para que tengan "espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Él," "sabiduría y revelación en el conocimiento de Él".
¿Cuál es el deseo de Pablo por una iglesia? Que conocerían a Cristo, que lo conocerían a fondo, profundamente. Es por eso que Pablo en Colosenses 3:16 dice: “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, en abundancia”.
Ahora él sabe que le está escribiendo a una iglesia verdadera porque si usted ve el versículo 15, él dice: “también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos”. ¿Por qué los menciona? Porque esas son las evidencias de la salvación verdadera: fe en el Señor Jesucristo y amor manifiesto por los santos.
¿Cómo supo él de esto? ¿Cómo supo que a la iglesia de Éfeso le estaba yendo tan bien después de cuatro años? Bueno, dice que él oyó; él oyó de eso. ¿Cómo habría oído él? Es un prisionero en Roma, no los ha visto en cuatro años, él está encarcelado. Pero los prisioneros podían recibir cartas y podían recibir visitas. Y durante el período de su encarcelamiento había recibido él, ambas cartas y visitas. Y los testimonios fueron siempre los mismos; se trataba de la fe de la gente en Éfeso y de su amor por los santos. Estas son evidencias de una iglesia verdadera.
Pablo le dice las mismas cosas a la iglesia de Tesalónica, al abrir esa carta. En Primera de Tesalonicenses 1: 2, 3 y 4, dice: "Conozco tu obra de fe y tu trabajo de amor". Fe y amor: confiar en Cristo, amar a los santos. Esta es la marca de una iglesia verdadera. Eso es lo que es una iglesia. Así es como usted sabe que es una iglesia verdadera de personas redimidas, porque su fe está en Cristo y ellos manifiestan la transformación al amar a todos los santos.
Entonces, sabemos que esta es una iglesia verdadera; esta es una iglesia que cree y ama. Y debido a que es una iglesia verdadera, Pablo puede orar por ellos para que comprendan todo lo que les pertenece. Y solo tengo que decir, hay iglesias con cristianos verdaderos en ellas que no tienen idea de lo que es de ellos en Cristo; se les engaña porque no se les enseña la Palabra de Dios. Sus pensamientos e intereses están por todas partes, cuando deberían estar enfocados única y totalmente en Cristo. Es cuando usted ve a Cristo, 2 Corintios 3:18, es cuando usted ve a Cristo que usted es cambiado a Su imagen de un nivel de gloria al siguiente.
Entonces, “Así que mi oración”, dice Pablo, “por ustedes es que el Dios, el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Dios que es una naturaleza con el Señor Jesucristo, el Dios que es el Padre de gloria, la fuente de toda gloria y el fin de toda gloria, os dé espíritu de sabiduría, os dé espíritu de sabiduría”. ¿Qué significa espíritu de sabiduría? Bueno, "espíritu" aquí se usa en el sentido de perspectiva, disposición, actitud. Esta es la forma en la que usted necesita dirigir su mente y sus pensamientos. “Quiero que Dios les dé un espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Él”.
Eso es lo que todo pastor debería estar orando por cada iglesia: que se pierdan en el asombro, el amor y la alabanza a Cristo. Solo entonces la iglesia se vuelve la iglesia; y volverse la iglesia es la forma en la que influye al mundo. Llegar a ser como el mundo es cómo pierde su influencia. Pablo está diciendo: “Quiero que ustedes, creyentes, comprendan plenamente todas las bendiciones espirituales en los lugares celestiales que están en Cristo” que vimos enumerados en esa sección inicial.
Entonces, ¿por qué ora un pastor, por su congregación? Sabiduría completa y revelación en el conocimiento de Cristo. Pedro escribe en 2 Pedro 1: 3 esencialmente lo mismo. Lo dice así: “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia”. Las riquezas de la gracia de Dios, que Pedro dice, "todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad", se vuelven nuestras mediante el conocimiento verdadero de Cristo.
Entre más conoce usted a Cristo, más comprende usted, más entiende usted, más disfruta de la plenitud de sus riquezas en Él. “Quiero que conozcan la plenitud de sus riquezas en Cristo. Quiero que conozcan a Cristo, todo sobre Él ".
“Todas las bendiciones espirituales”, capítulo 1, versículo 3, “todas las bendiciones espirituales, toda bendición espiritual en los lugares celestiales”. Cada una de las bendiciones espirituales que tiene el cielo está depositada en la vida de aquellos que conocen a Cristo. ¿Entiende usted eso? ¿Entiende la plenitud de eso? Ahí es donde debería estar su preocupación, que se parezca tanto a Cristo que irradie Su gloria. Así es como la iglesia influye al mundo. Al silenciar eso u ocultar eso y tratar de actuar como el mundo hace que la iglesia no solo sea irrelevante sino impía.
Escuche lo que tenemos en Cristo, solo algunos pasajes. Juan 1:14 y 16, “Y el Verbo” —hablando de Cristo— “se hizo carne y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia”. Él está lleno de gracia y de verdad, y en Él recibimos gracia y verdad, gracia sobre gracia, sobre gracia, sobre gracia.
¿Conoce usted a Cristo en esa profundidad, de modo que comprende todo lo que es suyo en Él? Juan 15:5 Jesús dijo: “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en Mí y Yo en él, éste lleva mucho fruto,” mucho fruto espiritual. Es cuando usted ve a Cristo que encuentra todas sus bendiciones espirituales. Colosenses 3:11 dice: “Cristo es todo. Cristo es todo; Él es todo ". Romanos 13:14 después dice: “Vestíos del Señor Jesucristo”, vestíos de Cristo; usen a Cristo, como sería. “No proveáis para los deseos de la carne". Esté consumido por llegar a ser como Cristo.
Escuche 1 Corintios 1, versículo 30: “Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús” —y me encanta esto— “el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención”. Es la forma en la que Pablo dice que todo está en Cristo. ¿Qué más podría usted desear que la sabiduría de Dios, la justicia, la santidad y el ser redimido? Todo está en Cristo.
Más adelante en 1 Corintios 3, escuche lo que dice Pablo: “todo es vuestro, y vosotros de Cristo, y Cristo de Dios”. O para revertirlo, “Dios es el que posee todas las cosas; Cristo, siendo Dios, posee todas las cosas; Cristo que vive en usted lo hace a usted el poseedor de todas las cosas".
Todas las cosas le pertenecen a usted, todas las cosas que pertenecen a la vida y la piedad, todas las bendiciones espirituales en los lugares celestiales. Pablo en Filipenses 1:11 lo expresa de esta manera: Han sido llenos de frutos de justicia. Han sido llenos de frutos de justicia que son por medio de Jesucristo, para gloria y alabanza de Dios". A los filipenses en el capítulo 3, Pablo —comenzando a comprender la profundidad de estas bendiciones y riquezas espirituales— les dijo lo siguiente: “Estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, lo tengo por basura, para ganar a Cristo”. Todo en este mundo es basura, excepto Cristo. Me alegro de dejarlo todo, toda la basura, por Cristo.
Así es como debe vivir la iglesia. Debemos vivir con esta preocupación devoradora por la persona de Jesucristo. En el Antiguo Testamento, Él es anticipado; en el Nuevo Testamento, Él es revelado. Y Él es la revelación de Dios que es la revelación más clara. Dios habló en el pasado a través de los profetas y los escritores del Antiguo Testamento. En estos postreros días, Él nos ha hablado por Su Hijo. Dios se muestra en Cristo. Conocer a Cristo es conocer todas las riquezas del cielo que son suyas porque usted es de Él. Las iglesias luchan con esto. Se enredan, se dejan engañar para alejarse de Cristo.
Vaya a Colosenses 2 y le daré una ilustración de esto. Colosenses, versículo 2. El final del versículo 2 dice: “Cristo mismo", y después el versículo 3 dice, "en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento". Todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento están en Cristo. Todos están en Cristo. Por eso, retrocediendo al final del capítulo 1, Pablo dice: "Aquí está la meta de mi ministerio," “a quien anunciamos", esto es Cristo, "amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre, para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí". “Tengo un objetivo en mi vida y es llevar a las personas a Cristo. Y luego, una vez que hayan sido traídas a Cristo, amonestarlos y enseñarles con toda la sabiduría celestial, para que sean completos en Cristo". Cristo es todo para él.
Regrese en ese mismo capítulo al versículo 15: Cristo “es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas". Él es el Creador “las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten”.
Él era antes de que todo fuera creado; Él fue el Creador de todo lo creado. Y Él es quien sostiene todo; Él es lo que lo mantiene unido. Cuando la ciencia dice que hay un salto cuántico, algo aquí en esta subpartícula atómica deja de existir y llega a existir aquí, pero nunca atraviesa el espacio intermedio, eso se llama salto cuántico y es inexplicable. ¿Cómo puede algo dejar de existir aquí, llegar a existir aquí y nunca pasa entre los dos? Y ahí es donde está Cristo. Él es el que mantiene todo junto. Él es el imposible de conocer, por lo menos en un microscopio.
“Él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia”, versículo 18. Él es el principio — una vez más, el primero — "el primogénito de entre los muertos" —de todos los que han resucitado de entre los muertos, Él es el primordial. Él es el único, al final del versículo 18: “para que en todo debe tener la preeminencia". Eso es tan simple. Él debería ser la preocupación consumidora de la iglesia, “por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud". Todo está en Cristo; Cristo es todo.
Es por eso que, en Efesios, Pablo dijo: "Oro para que Dios les dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Él". Todo se trata de conocer a Cristo. Y hacia el final de ese primer capítulo, Pablo dice: "Ese es mi objetivo en el ministerio, es proclamarlo a Él, proclamarlo a Él". Escucho muchas cosas de muchos supuestos predicadores en estos días. Digo esto con demasiada frecuencia; Yo digo: "¿Por qué nadie jamás habla de Cristo? ¿Por qué?" A quien anunciamos. La plenitud está en Él.
Bueno, mire lo que le pasó a los colosenses. Vaya al capítulo 2, versículo 8: “Mirad, que nadie os engañe". En usos posteriores en griego, ese verbo se usó para secuestrar. “Mirad que nadie los rapte por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo”. No deje que ninguna filosofía humana, ideología, engaño vacío, principios elementales del mundo desvíen su atención de Cristo.
Me parece que, en la forma actual de los evangélicos, sea cual sea su forma conforme cambia, hay una preocupación consumidora por todo, menos por Cristo. Habrá un esfuerzo interminable por engañar, hecho en la iglesia por parte de mentes humanas — filosóficas, psicológicas, sociales, religiosas, políticas — por llevar cautiva a la iglesia, para secuestrar a la iglesia, con engaño vano en las tradiciones de los hombres. Las “tradiciones de los hombres” es algo muy obvio, solo ideas humanas. De ahí viene la filosofía. Y la filosofía es un engaño vacío. “Rudimentos del mundo”, esa es una frase muy interesante. Básicamente significa ABC, plática de bebés.
Ahora sé que cuando piensa en el mundo, piensa que hay cierto grado de sofisticación en el mundo; y en cierto nivel lo hay. Ciertamente lo hay en las ciencias duras y cosas así, matemáticas y demás. Pero cuando se trata de filosofía, lo cual es una forma de entender el mundo mientras que está ignorando a Dios o rechazando a Dios, usted no llega nada más que un engaño vacío, y no obtiene nada más que ideas humanas transmitidas de una persona a otra. Y en realidad, la filosofía humana es simplista. Lo simple es bueno; simple significa que no es complicado. Simplista es una mala palabra. Si alguien dice: "Eres simplista", significa que no estás dando una respuesta razonable. Simplista es subestimar la realidad de algo.
Estuve en el campamento esta semana con mil jóvenes en Nuevo México, y los de último año de preparatoria de Grace se reunieron y querían tener una sesión de preguntas y respuestas. Fue maravilloso; Me encanta hacerlo. Y quizás la pregunta más reveladora provino de: estos son estudiantes de último año de preparatoria, dijeron: “¿Qué necesitamos saber, al enfrentar la universidad, y seguir en el futuro? ¿Qué protecciones deberíamos tener? " Y yo dije: “Necesitan dos cosas, dos cosas, sin las cuales van a ser una víctima del mundo.
Número uno: necesitas convicción. Necesitas convicción. Tienen que tener algunos no negociables, tienen que tener algunas convicciones por las que morirían. Y tienen que saber por qué, y tienen que poder fundamentarlos en la Palabra de Dios y en su propia conciencia. Sin convicciones eres un corcho en las olas; terminarás donde sea que te lleven. Necesitas convicciones". Y qué bendición haber sido, para la mayoría de ellos, ser criados en las influencias de Grace Community Church, donde tienen esas convicciones de quienes los rodean aquí; y para muchos de ellos, sus propias familias. Usted tiene que tener convicciones.
Las convicciones que usted tiene son los pilares inamovibles de su virtud. Son la estructura. Porque lo que van a querer hacer en la universidad es aplastar esas convicciones porque son convicciones bíblicas y son verdad.
Y el mundo es impío, y el mundo está dirigido por Satanás, quién es un mentiroso. Van a atacarlo a usted con mentiras y van a atacar las convicciones que usted tiene acerca de Dios, acerca del hombre, acerca del pecado, acerca de la justicia, acerca de la conducta, acerca de la moralidad, acerca de todo. Usted debe tener convicciones.
Lo segundo que necesita tener es pensamiento crítico, pensamiento crítico. Y creo que, para este período en particular de la historia, esto es lo que más está bajo ataque. Y permítame decirle cómo ver eso. Las universidades en estos días, ciertamente en el lado de las humanidades, las universidades en estos días están preocupadas por las ideologías. Escucha mucho de esto, una ideología. ¿Qué quieren decir con ideología? Es solo otra palabra para una filosofía. Pero las ideologías en el clima actual son engañosas y atractivas para la gente porque son insensatas, insensatas.
Así es como funciona una ideología: "¿Qué está mal en Estados Unidos? Privilegio blanco. ¿Qué está mal en Estados Unidos? Racismo sistémico. ¿Qué está mal en Estados Unidos? Abuso de mujeres". Ellos quieren que usted acepte el hecho de que todo lo que está mal en Estados Unidos puede explicarse mediante una ideología. Ellos no quieren que usted piense de manera crítica al respecto. “¿Qué está mal en Estados Unidos? Algunas personas tienen dinero y otras no. ¿Qué está mal en Estados Unidos? Las corporaciones se están enriqueciendo y se está abusando de la gente. ¿Qué está mal en Estados Unidos?"
Pueden reducirse a una ideología, una idea simple, única. Esto es torpeza. Y las universidades están realmente empeñadas en enseñar a la gente a ser torpe. Esto es infantil. Usted no puede decir: "¿Qué está mal en Estados Unidos? racismo sistémico”, no importa lo que sea; si el autobús no llega a su esquina a tiempo, "Bueno, es racismo sistémico". Si tiene moho en su pan, "Bueno, es racismo sistémico". Esa es la torpeza de esa simplificación excesiva de todo, que es fácil para la gente aguantar y dejarse engañar porque es una respuesta única para todo, y puede colocar su cerebro en una bolsa y enterrarlo. Usted tiene que pensar de manera crítica. Tiene que entender.
Por ejemplo, le voy a dar una ilustración. En Estados Unidos, el 99,9 por ciento de la población sobrevive al COVID; ese es un hecho. Usted no puede combinar eso con el comportamiento que ellos demandan. ¿Qué tal esto? "Vacúnate". Y se dice a sí mismo: "Bueno, veamos, mintieron acerca de Rusia. El FBI miente, la CIA miente, la Organización Nacional de la Salud miente. La Organización Mundial de la Salud miente. El Centro de prevención de enfermedades miente. El director de todo esto miente, porque dice algo diferente cada vez que abre la boca. Los políticos mienten. Mintieron sobre un incidente en Chicago. Son solo mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras ".
Y luego te dicen: “Vacúnate; es bueno para ti." Sé por qué la gente no se vacuna, porque la gente no cree que se les está diciendo la verdad. Es simple. Es solo la vieja fábula de Esopo sobre el niño que gritó: "Lobo, lobo, lobo, lobo", nunca hubo un lobo. Y cuando había un lobo, no aparecía nada. Usted no puede seguir mintiendo y luego esperar que la gente le crea. Tiene que pensar de manera crítica, reflexiva y cuidadosa. Debe darse cuenta de que los Centros de Prevención de Enfermedades informan que la tasa de mortalidad por influenza normal el año pasado fue 99 por ciento más baja. Ah, de verdad. ¿Qué pasó con la gripa? ¿A dónde se fue? Entró en la estadística del COVID.
El caos del engaño y la mentira lo forza a usted, si quiere navegar por el mundo en el que vive, a pensar de manera crítica. ¿Hay cosas que están mal con el capitalismo? Se puede abusar del capitalismo, al igual que se abusa del socialismo. Se puede abusar de cualquier cosa porque los pecadores se dedican a ello. Cualquier tipo de relación, cualquier tipo de cualquier cosa en las relaciones humanas va a ser bueno, malo e indiferente. Pero lo que quieren que haga usted es que acepte: acepte el paquete y cierre las discusiones alternativas. Por eso cancelan la cultura, porque quieren que usted acepte la ideología, no quieren que usted piense de manera crítica. Pero pensamos de manera crítica porque pensamos bíblicamente y tenemos la mente de Cristo. Primera de Corintios 2:16, “Nosotros tenemos la mente de Cristo".
No quiero enredarme en la filosofía, que es otro término para la sabiduría humana. No quiero enredarme en un engaño vacío. No quiero enredarme en algo simplemente transmitido de persona a persona en la tradición. Y ciertamente quiero superar el nivel torpe del ABC. No me puede usted reducir a un torpe simplista. La sabiduría humana es infantil comparada con la sabiduría divina.
Así que vea el versículo 9, Colosenses 2. Mire, no le prestamos atención a eso, pero prestamos atención a Cristo, "Porque en Él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis". - ¿qué? -"completos." Todo lo que necesitamos está en Cristo. Primera de Corintios 2:16, "Tenemos la mente de Cristo". Tenemos la mente de Cristo.
Entonces le dije a esos estudiantes de preparatoria: convicciones, pensamiento crítico. Piense como un cristiano. Piense como Cristo. Piense bíblicamente. No se deje secuestrar por las mentiras.
Bueno, esa es la introducción. La semana próxima regresaremos a este pasaje, y quiero mostrarle que Pablo ora para que entendamos la grandeza de —con respecto a Cristo— la grandeza de Su plan, la grandeza de Su poder y la grandeza de Su persona. Eso es para el domingo próximo.
Padre, estamos agradecidos más allá de la comprensión por todo lo que es nuestro en Cristo. Y que la Palabra de Cristo mora en abundancia en nosotros. Ayúdanos a buscar profundamente en los tesoros de la sabiduría y el conocimiento, que están todos escondidos en Él. No nos dejes ser engañados. No nos dejes ser secuestrados por la filosofía humana, el engaño, la filosofía humana, la tradición humana, las ideas simplistas diseñadas para engañar. Que pensemos bíblicamente. Danos sabiduría. Concédenos sabiduría. Concédenos un entendimiento completo de la revelación que nos da el conocimiento de Cristo. Ayúdanos a pensar como Él, conforme permitimos que Su Palabra more ricamente en nosotros y somos transformados a Su imagen de un nivel de gloria al siguiente. Esa es nuestra oración, en Su nombre. Amén.
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