La pregunta es casi cómica: ¿Por qué Dios querría su dinero? No puede ser porque Él necesita ayuda financiera -Él posee todo y no tiene necesidad de nada, incluido su dinero en efectivo o su cambio.

Sin embargo, Dios nos da, y luego, requiere que demos de regreso por motivos específicos e importantes - razones mucho más elevadas de lo que usted jamás ha imaginado.

Entonces, ¿cuál es cuál es la importancia de colocar su dinero arduamente ganado en el plato de ofrendas en la iglesia? Si Dios no necesita dinero, ¿por qué lo pide? ¿Cuál es la relación entre sus posesiones y su adoración? ¿Y la práctica usual de dar el diez por ciento se aplica a los cristianos hoy en día?

El plan de Dios para ofrendar explora el pensamiento de Dios detrás de darle a usted recursos financieros y explica cómo el simple acto de dar no sólo tiene consecuencias eternas, sino que también trae bendiciones a su vida aquí y ahora. Dar una ofrenda al Señor puede y debe ser un acto reflexionado, fiel y con gozo - el estudio de El plan de Dios para ofrendar muestra cómo hacer que eso se convierta en realidad.