Inclusive el atardecer más glorioso, cuando es contemplado por mucho tiempo, eventualmente, perderá su atractivo. La escena se vuelve tan familiar que los sentidos pierden interés en sus colores y belleza extraordinarios. El paisaje no necesita cambiar -sólo su perspectiva.

Tal es el caso de la Pascua. Nuestros ojos modernos han visto la historia maravillosa durante tanto tiempo, que hemos perdido nuestro aprecio por su riqueza. Lo que es aún peor, hemos perdido la historia real -las fuerzas operando detrás de escena que hacen que la crucifixión y la resurrección sean momentos determinantes para toda la humanidad.

En La Pascua vista por los ojos de Dios, John MacArthur enfoca la historia de Pascua desde la perspectiva única de Dios, Él mismo. ¿Cómo es que una muchedumbre furiosa y cruel cumplió los propósitos de Dios? ¿Cuál fue el rol de Dios en la muerte sufriente de Su propio Hijo? ¿Por qué es la resurrección de Jesús el eje sobre el cual gira toda la historia humana? Este estudio cautivador provee las respuestas.